No son tiempos de ambigüedades o medias tintas, sino de asumir la realidad económica que atosiga a los españoles y de remangarse, sin prejuicios o cálculos interesados, para acometer con urgencia más reformas. Esa es la filosofía que ha impregnado el mensaje de Navidad del rey Juan Carlos de este año, que incluso ha señalado a los responsables de sacar al país del atolladero, entre los que se incluye: "Todos, empezando por nuestros partidos políticos y agentes económicos y sociales, somos importantes para conjugar voluntades en esta dirección, con generosidad, sentido de Estado y pensando en el interés general". Pero por si alguno de los aludidos dudaba aún de que Juan Carlos les alerta contra peligrosas estrategias personalistas, ha sido más claro. "De cómo le vaya a España depende cómo le vaya a cada uno de los españoles. Por eso, no caben actitudes individuales ni colectivas de indiferencia o egoísmo, que a la postre dañan a todos", ha rematado.

Dicho esto, ha aconsejado a los ciudadanos desterrar el desánimo y "levantar la cabeza y continuar la faena" para superar las dificultades con ambición, pese a reconocer que el año que termina ha sido complejo y ha estado marcado, ha dicho, por una crisis "más larga e intensa" de lo esperado. "En nuestro caso ha puesto de manifiesto desequilibrios y deficiencias estructurales que hemos de resolver desde la unidad, con eficacia y prontitud", ha sentenciado.

A continuación, el Monarca ha fijado su atención en la situación de los parados, "lo más doloroso" de esta recesión que ha golpeado con brusquedad a España, y ha marcado una prioridad "insoslayable" a los políticos: la toma de medidas dirigidas a la creación de puestos de trabajo, especialmente para los más jóvenes.

Víctimas de los tijeretazos

Tampoco ha querido olvidarse el Rey de otros sectores castigados sin piedad por la coyuntura económica, como los autónomos, ni de esos grupos de ciudadanos que han sufrido en sus sueldos o pensiones las consecuencias del tijeretazo del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. "Pienso en quienes han tenido que cerrar comercios, talleres o negocios. En todas las personas que han asumido grandes sacrificios y esfuerzos a lo largo de este año: trabajadores asalariados, autónomos, profesionales, empresarios, pensionistas o funcionarios. Todos ellos merecen nuestro más amplio respaldo", ha aseverado.

Tras aludir a los damnificados por los recortes, Juan Carlos ha subrayado que todavía serán necesarias más reformas para crecer, crear empleo y modernizar el modelo productivo, además de cumplir con los compromisos presupuestarios y de déficit sin perder de vista la protección y la cohesión social. "Es preciso seguir adelante con empeño", ha dicho para concluir el jefe del Estado.