La ministra de Industria, Comercio y Turismo en funciones, Reyes Maroto, ha subrayado este jueves que el reto demográfico es una cuestión de Estado y ha reivindicado "la vida de pueblo" frente a esta "cuestión compleja", que hay que abordar "con urgencia" a través de medidas "eficaces".

Maroto ha clausurado el acto de presentación del monográfico "España ante el reto demográfico" de la revista Información Comercial Española, en el que distintos expertos analizan este asunto y proponen soluciones para hacerle frente.

La ministra ha dicho conocer bien las dificultades a las que se enfrenta la población del mundo rural, porque procede de él, y ha reivindicado la "vida de pueblo" y el desarrollo de un proyecto vital, dignificando y promocionando la vida en núcleos no urbanos, eliminando los estereotipos.

Para Maroto, el reto demográfico es "fundamentalmente" un asunto de desigualdad y ha asegurado que la despoblación es el síntoma, pero la enfermedad es la desigualdad, por lo que hay que combatirla si se quiere abordar.

Maroto ha citado algunas de las iniciativas que se están llevando a cabo desde su ministerio como el proyecto "La Exclusiva", un ejemplo de empresa social que persigue reducir la despoblación en el medio rural mediante algo tan sencillo como el reparto de suministros y servicios de primera necesidad en pueblos pequeños de Soria y Burgos, que se va a extender a Castilla-La Mancha.

"Abordar el reto demográfico es una cuestión de Estado, es esencial para construir un proyecto de país, y ello requiere adoptar medidas a corto, medio y largo plazo", ha señalado Maroto, quien ha considerado que la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico "es el marco idóneo, la hoja de ruta para los próximos años".

También Ignacio Molina de la Torre, director del Comisionado del Gobierno para el Reto Demográfico, ha considerado que es "una cuestión de país" porque implica dar respuestas urgentes y ha advertido que no es "campo para la demagogia ni para resignación ni para el agravio".

Ha insistido en que se requieren respuestas múltiples y una visión transversal, no solo de todos los ministerios, sino también de la colaboración público-privada que debe ser "reforzada e intensificada".

La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha hecho un repaso de algunas de las cuestiones que se analizan en el monográfico como el control del gasto sanitario, o la inmigración, que parece que por sí sola no puede revertir el cambio demográfico.

Además, los autores se centran también en la brecha generacional que no otorga a los más jóvenes el mismo nivel de protección que disfrutan los mayores.

La socióloga Begoña Cueto, una de las autoras, ha defendido hacer una transición hacia un sistema de prestaciones dirigidas a las familias más jóvenes con hijos pero también a las que no los tienen pero están en mala situación económica.

Otro de los autores, el economista José Antonio Herce ha señalado que el problema es la longevidad y no que no nazcan niños, por lo que aunque se restableciese la tasa de natalidad en 2,1 niños por pareja (ahora está en 1,3) habría problemas para financiar las pensiones porque cada año que pasa la esperanza de vida aumenta dos meses.