Dos semanas es el plazo en el que Albert Rivera confía que pueda desencallarse la situación, en el que espera que se aclare si hay un nuevo ejecutivo o se va a elecciones. Eso sí, ha vuelto a insistir en que Ciudadanos no integrará un gobierno con Podemos.

En una entrevista en la cadena SER, Rivera ha insistido en que suacuerdo con Pedro Sánchez sigue vivo y ha apostado por ungobierno PSOE-Ciudadanos con una agenda reformista que pueda tender puentes y recibir apoyos puntuales del PP en temas económicos y de Podemos en los sociales y de regeneración democrática.

"Me parece lo menos malo", ha afirmado Rivera, quien ha dicho que no se trata de escoger entre que "no nos roben" y "no nos cuadren las cuentas" y ha asegurado que si el acuerdo de gobierno tiene la esencia del 90% de lo acordado con el PSOE, "bienvenidas sean" las aportaciones del PP y Podemos.

Rivera ha pedido a sus negociadores que contacten a principios de la próxima semana con estos dos últimos partidos para formar mesas de trabajo que, en su opinión, no deberían estar encabezadas por los líderes de los partidos, que deben limitarse a "salir" cuando se sellan acuerdos o, bien, cuando ya es imposible alcanzarlos.

LA ÚNICA VÍA "QUE CUAJA"

Por otra parte, el líder del partido naranja ha negado que Sánchez le haya pedido rebajar sus propuestas para así propiciar un gobierno tripartito con Podemos y ha asegurado que la vía de su acuerdo con el PSOE es la que hoy "está cuajando".

No obstante, ha reiterado que si el PSOE quiere un gobierno con Podemos, "no pasa nada", Ciudadanos votaría en contra y estaría en la oposición. Pero ha precisado que si estos dos partidos quisieran, ya estarían gobernando, porque el problema no está en Ciudadanos, sino en que Sánchez e Iglesias tienen "un marco territorial y económico distinto". "El PSOE no quiere disparar el déficit", ha ejemplificado, mientras que, sobre el debate soberanista, ha afirmado que no tendría mucho sentido que los socialistas "autoenmendaran" la resolución de su comité federal.