El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, afirmó ayer que en su partido todos reman «en la misma dirección» desde que la mayoría de la Ejecutiva ratificó hace una semana la decisión de no facilitar la investidura del líder del PSOE, Pedro Sánchez, como presidente del Gobierno.

«Como demócratas, cuando hay decisiones, todos remamos en la misma dirección, que es lo que estamos haciendo desde esa votación», declaró en el Congreso tras reunirse con el presidente de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Javier Esparza. Según señaló, Ciudadanos es «un partido democrático» y se siente «orgulloso» de ello. «Somos el partido que más vota en la Ejecutiva» y donde «más veces toman la palabra», aseguró.

Esta fue la respuesta de Rivera cuando le preguntaron por el líder de la formación naranja en el Parlamento Europeo y responsable de Economía y Empleo, Luis Garicano, y por el portavoz en las Cortes de Castilla y León, Francisco Igea, favorables a pactar con el PSOE.

Nueva votación / La Ejecutiva de Ciudadanos decidió por unanimidad el pasado febrero que no se facilitaría la investidura de Sánchez, pero el 24 de junio Garicano y el eurodiputado Javier Nart forzaron una nueva votación sobre esta cuestión. La opción de mantener la estrategia trazada por Rivera obtuvo una clara mayoría, 25 votos, pero también hubo cuatro dirigentes que reclamaron abrir una negociación con Sánchez y otros tres se abstuvieron.

Tras la votación, Nart dimitió de su puesto en el Comité Ejecutivo. Y pocas horas antes, el secretario de Programas y Áreas Sectoriales y portavoz adjunto en el Congreso, Toni Roldán, había anunciado que se marchaba y renunciaba a su escaño por discrepar de la estrategia y la política de pactos.

Socio preferente / Una de las críticas de Roldán estaba relacionada con la posición del partido tras las elecciones municipales y autonómicas. También por unanimidad, la Ejecutiva de Ciudadanos decidió el pasado 3 de junio que el PP sería el socio preferente para negociar acuerdos de gobierno, que solo se abriría a hablar con el PSOE allí donde no fuera posible un pacto con los populares y que no alcanzaría acuerdos con Vox.

Sobre el tema de la investidura de Sánchez, el líder de Ciudadanos manifestó que no contempla acudir a otra ronda de contactos con el candidato socialista si le cita para tratar su investidura porque, según dijo, no tiene nada más que hablar con él: «Yo no voy a perder el tiempo ni a hacer perder más tiempo».

Rivera, en declaraciones en el Congreso, dejó claro que no tiene previsto volver a mantener una reunión con Sánchez, después de que declinara acudir a Moncloa hace un par de semanas y ha insistido en que con quien tiene que negociar el secretario general socialista es con sus socios -Podemos y los nacionalistas- con quienes ya está cerrando acuerdos en muchos ayuntamientos y comunidades. Rivera insistió en que el papel de Cs es ejercer la oposición.