Con semblante tranquilo y afirmando sentirse "muy bien", el exasesor de Urbanismo y presunto cerebro de la trama de corrupción de Marbella, José Antonio Roca, abandonó ayer la cárcel por unas horas para declarar ante el juez de la operación Malaya y para testificar sobre el caso Saqueo I , que se sigue en la Audiencia Nacional. Isabel García Marcos también declaró ayer por supuestos delitos urbanísticos.

El abogado de Roca, José Aníbal Alvarez, trató de quitar hierro a la declaración de Roca. Explicó que durante la comparecencia se revisaron "varias fotocopias" de la documentación del caso Saqueo 1 que ya habían sido analizadas en la Audiencia, y documentación encontrada en la vivienda de Roca. El letrado aseguró que eran "documentos que no tienen trascendencia".