ETA planea un "secuestro espectacular" que le garantice protagonismo continuado en los medios de comunicación y que no cause un excesivo rechazo en los círculos de la izquierda aberzale que le han sido fieles y que ahora debaten sobre su futuro político. Este insólito anuncio --que se sustenta en la información que maneja la Guardia Civil procedente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI)-- lo realizó ayer en Bilbao el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, advirtiendo a la vez, claro está, de que las fuerzas de seguridad están alerta y han tomado medidas para evitarlo.

Aunque se mostró remiso a facilitar más datos, Rubalcaba admitió que la potencial víctima sería de "sectores significativos desde el punto de vista social". También rehusó precisar si en los últimos meses o semanas los agentes se han incautado de alguna documentación que avale la hipótesis del eventual secuestro, sobre todo teniendo en cuenta que desde 1997, año del rapto y asesinato de Miguel Angel Blanco, ETA no ha desarrollado una acción semejante.

Lo que sí explicó el ministro es que, según el análisis de riesgos del Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista (CNCA), una ETA débil como la actual "es mucho más peligrosa e imprevisible". Y eso, añadió, alimenta la posibilidad de que busque una acción muy llamativa para asegurarse cierta notoriedad.

DIVISION En una sala del súper centro policial de la Ertzaintza en Erandio (Vizcaya) y sentado junto al consejero de Interior vasco, Rodolfo Ares, Rubalcaba se mostró interesado en hablar de la banda. Contó que en la reunión de la Junta de Seguridad del País Vasco habían repasado la situación del "entramado etarra". Aunque no aludió al encarnizado debate que vive la izquierda aberzale entre quienes quieren apostar solo por la política y los que abogan por mantener la lucha armada, sí subrayó que hay divisiones que "acentúan" la debilidad de ETA. Pero precisó que ni esa fractura ni la menor disponibilidad operativa impedirán que la banda terrorista intente aprovechar la presidencia europea que España estrena en enero para realizar una acción importante, ya sea un atentado o un secuestro.

PRECEDENTE De hecho, no sería la primera vez que ETA trata de desestabilizar al Estado cuando la atención internacional se centra en España. Ya lo intentó sin éxito durante los Juegos Olímpicos de Barcelona, en 1992. La organización tenía preparada una gran ofensiva, pero la detención de toda la cúpula en la localidad francesa de Bidart, a primeros de ese año, desbarató la estrategia.

El ministro confirmó que, dadas estas premisas, se intensificarán "al máximo" las medidas de protección y no se escamotearán medios para impedir que ETA se salga con la suya. De hecho, ayer mismo firmó con el consejero un protocolo de coordinación en materia antiterrorista. El acuerdo garantiza que todas las policías trabajarán en el análisis conjunto, el intercambio de información y la planificación de actuaciones en la lucha contra el terrorismo.

COOPERACION Además, los gobiernos central y autonómico se comprometieron a que, antes de que finalice febrero, la Ertzaintza se incorporará al Centro de Cooperación Policial y Aduanera de Hendaya (Francia). Se trata de una reivindicación histórica de la policía vasca que, según Rubalcaba, se concreta ahora porque "poco a poco" se afianzan y mejoran los mecanismos de cooperación. Por contra, el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, denunció que el acuerdo se materializa en este momento porque es el socialista Patxi López quien está al frente del Ejecutivo autonómico.

"Combatimos a ETA en todos los frentes y por eso reforzamos la colaboración", argumentó Ares. El consejero expresó además su convencimiento de que el trabajo conjunto de las policías permitirá "acelerar el final" de los terroristas.