El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ofreció ayer uno de los argumentos más sólidos que se han oído para persuadir a los jueces del comité olímpico, que ayer finalizaron su visita a Madrid, de la conveniencia de que la capital albergue los Juegos del 2016: en esa fecha ETA estará casi finiquitada.

"Trabajamos con la determinación y la confianza en que quien ocupe el Ministerio del Interior en el año 2016 no tendrá que preocuparse de la banda terrorista ETA", sostuvo en una rueda de prensa tras entrevistarse con el comité de evaluación de la cita olímpica.

Rubalcaba argumentó que la "tendencia" indica que la banda terrorista está "cada día más débil y el Estado más fuerte" y subrayó que sus comandos no han logrado frustrar anteriores acontencimientos deportivos.