El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado que "los señores de ETA saben perfectamente lo que hay, porque está negro sobre blanco en lo que el presidente ha dicho. De ahí no nos vamos a mover ni una coma. Las reglas son las reglas. A ellas hay que atenerse. Y esas reglas no se cambian ni con comunicados ni con chantajes ni con ningún tipo de acción. No se cambian", ha insistido en una rueda de prensa celebrada en Santoña.Rubalcaba ha respondido de esta manera al último boletín interno de ETA, en el que la banda terrorista dice que está dispuesta a hacer "un nuevo esfuerzo en el carril de la negociación", pero también advierte de que el proceso está "en crisis" y puede "romperse" si no hay avances.Reglas inamovibles"Las reglas por las que el Gobierno va a conducir el proceso de paz en Euskadi" las estableció el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Parlamento en junio y "las va defender con firmeza porque son inamovibles", ha dicho."Esas reglas se resumen fácilmente. Tienen un requisito previo: que no haya violencia. Tienen una metodología, que es el diálogo. Y tienen un marco para ese diálogo: la legalidad vigente", ha asegurado el ministro.Final de la violencia en EuskadiPérez Rubalcaba ha recalcado que "el Gobierno tiene una gran voluntad por ver el final de la violencia en Euskadi y en el resto de España, pero también tiene una determinación y una firmeza total para que esas reglas se cumplan", al tiempo que ha subrayado que "hay un marco del cual no nos vamos a salir y es la legalidad vigente".El Gobierno, ha continuado el ministro, "tiene tanta determinación para acabar con la violencia como firmeza para mantener esas reglas" y "todos sus compromisos están" en la declaración institucional que hizo el presidente Zapatero. "Y no hay más que decir", ha apostillado.Violencia callejeraRespecto al ataque con botellas incendiarias de anoche contra la Casa del Pueblo del barrio bilbaíno de Txurdinaga, ha indicado que "es justamente algo que no está en las reglas" y que, por ese motivo, reitera que "el requisito es la ausencia de violencia".El ministro también ha comentado las relaciones que el Gobierno y el PSOE mantienen en este asunto con el PNV, partido con el que, señaló, están "trabajando bien", aunque tengan discrepancias."Ellos han pedido una modificación de la política penitenciaria en la que nosotros no estamos. Nosotros creemos que no hay que modificarla. Y si un día pensamos que hay que hacerlo, serán los grupos parlamentarios los primeros en saberlo", ha expuesto.No obstante, ha matizado que "en lo que se refiere al proceso y a las reglas, el acuerdo con el PNV es total", aunque los nacionalistas hayan utilizado "algunas expresiones" que a él no le "gustan".