No ha podido ser más premonitorio el reportaje que con el título ‘Coqueteos’ publicó EL PERIÓDICO EXTREMADURA el pasado 18 de mayo y que incluía una fotografía en la que aparecía el candidato del PSOE, Luis Salaya, junto al de Ciudadanos, Francisco Alcántara, pillados in fraganti durante un encuentro fugaz en la calle San Pedro. Desde hoy esa foto se tendrá obligatoriamente que repetir porque aunque después de 28 años el Partido Socialista ganó ayer las elecciones en Cáceres (el último socialista que lo consiguió fue Carlos Sánchez Polo) necesita de Ciudadanos para poder gobernar.

Con el 100% de los votos escrutados, los socialistas han obtenido 16.995 votos, lo que se traduce en 9 concejales (gana un edil), frente a la caída bestial del PP con 12.952 que se queda con 7 concejales (pierde 4), los 9.623 de Ciudadanos, con 5 (gana uno), los 5.452 de Podemos, con 3 ediles (gana uno) y Vox, que finalmente logra meter cabeza en el plenario gracias a sus 3.452 votos y un concejal.

Francisco Alcántara, de Ciudadanos, junto a su equipo en Mastropiero.

En este escenario plagado de incertidumbre, la suma de PP, Ciudadanos y Vox, en un hipotético pacto a la andaluza, podría arrebatarle la alcaldía a Salaya. Con la decisión de las urnas, queda claro que el futuro del ayuntamiento no dependerá del número de votos sino de la capacidad de diálogo y acuerdos que tengan los partidos.

Anoche, Luis Salaya salió a las puertas de la sede local del PSOE en Los Fratres al grito de ‘alcalde, alcalde’. Arropado por la diputada en Cortes, Belén Fernández Casero, y con una inevitable alegría agridulce. Salaya habló de «victoria contundente» aunque admitió «que a nadie se le escapa que las victorias electorales, a día de hoy, dejan muchas más incógnitas que en el pasado». No obstante, avanzó: «Yo creo que además de ganar, vamos a gobernar Cáceres». Se amparó para ello en el mensaje de «cambio indiscutible» que han mandado los ciudadanos. Recordó que ahora empieza una ronda de diálogo y que hablará, reiteró, «con quien quiera hablar con nosotros».

Dijo que a partir de hoy comienza un trabajo «muy importante, que es el de conseguir un gobierno sólido, estable y de progreso». Se negó a que en esas negociaciones haya «un tira y afloja, no queremos una legislatura hablando de lo pequeño, sino de lo grande».

Lo grande, en estos momentos, es Ciudadanos. La formación naranja no cerró ayer ninguna puerta. Tras el escrutinio de votos, que le conceden cinco concejales y le convierten en llave de gobierno, su cabeza de lista, Francisco Alcántara, insistió en declaraciones a los medios, en que independientemente de los acuerdos, reclamarán entrar en el gobierno. «Aquí ya no caben pactos de investidura como en la anterior legislatura, queremos estar en el centro de decisión», anotó. Alcántara compareció en Mastropiero, lugar en el que integrantes de la lista del partido en Cáceres aguardaron los resultados. Agradeció a simpatizantes y a apoderados «por su apoyo al proyecto» y felicitó a PP y PSOE local. En esa misma línea, reconoció que las «expectativas eran mayores», no obstante, Alcántara mostró su «satisfacción» por el aumento de concejales. En referencia a las pasadas elecciones locales, señaló que en este caso la única opción que contemplan «es formar parte de un gobierno de coalición». «Cualquier opción pasa por nosotros», sentenció. En cuanto a posibles pactos, no quiso desechar conversaciones con ninguno de los partidos. Tampoco descartó un acuerdo en el que entre Vox. «Estamos dispuestos a ser aliados leales, queremos que Cáceres salga de esa situación de letargo, tenemos un programa que puede tener vínculo con uno o con otro, pero apostamos por una opción estable», concluyó.

Precisamente la misma palabra, «estable», pronunció Rafael Mateos, candidato del PP a la alcaldía cuando entró a valorar los resultados de su formación en Cáceres. Los populares perdieron ayer tres concejales, pasan de 11 a 7 ediles, aunque aún no se alejan de las posibilidades de lograr la alcaldía si logran alcanzar un acuerdo con Ciudadanos (5) y Vox (1). Con gesto comedido, compareció ayer el número uno de la lista popular en la sede del PP local en Antonio Hurtado y no en el Hotel Extremadura como era habitual. Lo hizo acompañado por integrantes de la lista que logran entrar en el ayuntamiento, José Ángel Sánchez Juliá (5) o Carla Nascimento (7). También estuvieron presentes Pedro Muriel (9), actual concejal, que no logra su asiento en el consistorio, la actual alcaldesa de la ciudad, Elena Nevado, y el presidente del PP provincial, Laureano León. En sus declaraciones, Mateos lamentó el descenso de votos y achacó el resultado a la «tendencia nacional» fruto de «la fragmentación de la derecha». «No son los resultados que esperábamos, no estamos ni satisfechos ni contentos, pero los asumimos», puso de manifiesto al tiempo que quiso agradecer «la confianza» depositada en el partido. En cualquier caso, insistió en que los datos constatan que «la ciudad quiere gobierno de centroderecha» y avanzó que a partir de hoy iniciarán «conversaciones con Ciudadanos y Vox para garantizar un gobierno estable en la ciudad».