El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha prometido este miércoles su cargo ante el rey en el Palacio de la Zarzuela, un acto que ha protagonizado por segunda vez y en el que, al igual que en la primera ocasión, lo ha hecho ante la Constitución y sin presencia de la Biblia y el crucifijo.

El Salón de Audiencias del palacio ha acogido este breve acto, en el que Sánchez ha adquirido la condición de jefe del Ejecutivo para liderar el primer gobierno de coalición de la democracia, entre PSOE y Unidas Podemos, tras haber obtenido ayer, martes, la confianza del Congreso con 167 votos a favor, 165 en contra y 18 abstenciones, entre ellas, las de ERC y EH Bildu.

Ante las principales autoridades del Estado y tras la lectura del real decreto rubricado por el rey con el nombramiento de Sánchez y publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE), Sánchez ha procedido a leer el texto de la promesa con su mano derecha apoyada en la Constitución:

"Prometo, por mi conciencia y honor, cumplir fielmente con las obligaciones del cargo de presidente del Gobierno, con lealtad al rey, y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros", ha recitado Sánchez.

El ejemplar de la carta magna ha estado abierto por el artículo 99, en el que se recogen, entre otros preceptos, la facultad del rey para consultar a los partidos y proponer un candidato a la presidencia del Gobierno y el procedimiento para lograr la investidura.