El sastre y exempleado de las tiendas madrileñas Milano y Forever Young José Tomás ha afirmado este martes que el president de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, "no ha pagado ni una peseta" de las prendas de vestir que adquirió en este último establecimiento, algo de lo que "ya nadie duda, ni siquiera el juez". Tomás ha hecho estas declaraciones a los periodistas a su llegada al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), donde ha empezado la vista previa en la que se decidirá si Camps es juzgado por un delito de cohecho impropio, al haber recibido supuestamente regalos de la trama Gürtel. "A estas alturas no sé cómo se preguntan quién pagó los trajes. No hay duda de que él no los pagó, ni siquiera el juez lo hace", ha insistido Tomás, que ha explicado que ha puesto una denuncia en la Fiscalía Anticorrupción para demostrar "ciertas irregularidades" relacionadas con el caso. El sastre ha manifestado su deseo de que "de una vez por todas se sepa la verdad de todo y que cada uno pague el precio que tiene que pagar". "Se va a sentar sin ninguna duda en el banquillo, y veremos si después no lo hace en otro", ha dicho en alusión al eventual juicio Camps. La sesión, que se celebra a puerta cerrada, está presidida por el magistrado José Flors, instructor de una causa en la que también están imputados el exvicepresidente del Gobierno valenciano Víctor Campos; el exsecretario general del PPCV Ricardo Costa y el exjefe de gabinete de la Conselleria de Turismo Rafael Betoret. Según las investigaciones iniciadas por el juez Baltasar Garzón y continuadas por Flors, todos ellos adquirieron prendas de vestir en diferentes establecimientos de Madrid que posteriormente fueron supuestamente abonadas por la trama corrupta. Además de escuchar las versiones de cada parte, en la vista de este martes prestarán declaración tres peritos contables --dos de la Agencia Tributaria y otro propuesto por Camps-- y comparecerán seis testigos, entre ellos Tomás, un chófer y un escolta del president, y uno de los supuestos cabecillas de Orange Market, Cándido Herrero. En sus peticiones provisionales, que este martes se elevarán a definitivas, el Ministerio Fiscal pide una multa de 41.250 euros para Camps, Costa y Betoret, y otra de 35.000 para Campos. El PSPV-PSOE solicita tres años de prisión y ocho años de inhabilitación para el jefe del Consell, aunque también pide alternativamente una pena de multa o inhabilitación.