La sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut ha provocado distintas reacciones entre los políticos y juristas españoles.

Alfonso Guerra, presidente de la Comisión Constitucional del Congreso

El exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra ha considerado hoy "bastante sensata" la sentencia y ha mostrado su extrañeza por el llamamiento a "la sublevación" del presidente catalán, José Montilla. En los pasillos del Congreso, el presidente de la Comisión Constitucional de la Cámara Baja -órgano al que le corresponde tramitar todas las reformas estatutarias- ha reconocido estar satisfecho por la interpretación que el TC hace de algunos preceptos del Estatut. Ha mencionado el caso del término nación o la supresión del consejo de justicia de Cataluña y del esfuerzo fiscal, contra los que él mismo había advertido, y ha señalado que sitúa "en su justo término" temas como la lengua o la financiación.

Aunque son muchos menos artículos que los que habían sido recurridos, Guerra ha subrayado que son "de una importancia cierta", porque definitivamente se aclaran cuestiones que eran dudosas. "Para algunos es demasiado; para otros, no ha sido nada", ha indicado Guerra, antes de hacer hincapié en que lo importante de este caso es lo que declara inconstitucional el TC y no tanto lo que avala. Sobre la postura de Montilla, se ha mostrado extrañado. "No entiendo nada -ha apuntado Guerra-. Seguramente están obligados ahora a hacer ruido, pero tendrán que acatarla y no pasará nada, como ocurre en cualquier Estado de derecho".

Gregorio Peces Barba, ponente de la Constitución

El ponente constitucional Gregorio Peces Barba ha dicho hoy que criticar la competencia del Tribunal Constitucional (TC) para dictaminar sobre el Estatut es "insólito", "carece de cualquier sentido" y es el "último de los largos despropósitos y errores que se han cometido en este asunto". En declaraciones a RNE, ha recalcado que hay que "respetar y cumplir" el fallo del tribunal. A su juicio, el fallo es parte de "despropósitos y errores" que comienza con "la desmesura" de un proyecto de Estatut "más largo que la Constitución" y "muy reglamentista", al que hay que sumar "el impulso y la falta de autocontrol de los partidos catalanes".

Emilio Olabarría, portavoz del PNV en el Congreso

El portavoz del PNV en la Comisión de Justicia del Congreso, Emilio Olabarraría, ha censurado la sentencia sobre el Estatut porque asegura que el término nación sí tiene "valor jurídico" y avisó de que el tribunal se "equivoca" al no reconocer los consejos de justicia catalanes. Sostiene que la opinión del TC sobre el preámbulo del Estatuto es "cuestionable", ya que desde su punto de vista, el contenido de esa exposición de motivos "no tiene un carácter ornamental, sino que sirve de elemento interpretativo del resto del texto". "Si ahí se consigna el concepto de nación, éste tiene el mismo valor jurídico si está ubicado dentro del contenido normativo", enfatizó.

Olabarría también ve "preocupante" que el TC contravenga, a su juicio, los "principios filosóficos de la Constitución" al tachar de inconstitucional todo el capítulo relativo a la Justicia. A su juicio, "una cosa es la jurisdicción unitaria" que consagra el texto constitucional y otra la estructura del Poder Judicial. Y opina que el TC "se equivoca gravemente" al mantener "el Poder Judicial como estrictamente centralizado" y constatar que el Poder Judicial es "el único que no se ha ajustado a los requerimientos de un Estado compuesto y sigue siendo el propio de un Estado unitario".

Por todo ello, el diputado del PNV considera que "se puede dudar con perfecta legitimidad" de una Justicia constitucional "que ignora la voluntad del pueblo catalán, de la de las Cortes Generales y de la del Parlamento catalán". "Cualquier decisión crítica contra la sentencia me parece perfectamente legítima", concluyó.

Gaspar Llamazares, diputado de IU

El diputado de IU, Gaspar Llamazares, ha hecho hoy un análisis crítico de la sentencia al entender que es una resolución cerrada y restrictiva, que no cohesiona ni favorece la integración territorial en España.

Llamazares ha lamentado que el TC haya aprobado la sentencia mediante "el método del salchichón" y ha subrayado que la interpretación que se hace del texto estatutario es "conservadora y restrictiva". De eso son igual de responsables, a su juicio, tanto los magistrados nombrados por el PP como por el PSOE, pues han compartido "esa sentencia conservadora que más que cohesión e integración territorial produce descohesión y desentendimiento".

Francisco Granados, consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid

El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, ha dicho hoy que "algo ha hecho mal" el Tribunal Constitucional (TC) cuando su sentencia sobre el Estatut "gusta a unos y otros" y ha considerado que la misma es "pobre" en su contenido. En su opinión, el Estatut "se ha llevado por delante buena parte de la credibilidad" del TC, que ha tardado -ha recordado- cuatro años en dictar sentencia, y ha añadido que la justicia si no es rápida no es justicia. Y ha considerado que el fallo es "pobre" en cuanto a su contenido, lo que va a crear, según Granados, problemas de interpretación en el futuro en las relaciones entre el Estado y el gobierno catalán.

"Me parece una componenda, un apaño que no soluciona el problema de fondo, que es la relación de Catalunya con el resto de España", ha agregado el consejero madrileño, para quien es sorprendente que el PSOE esté "muy satisfecho" en Madrid y al mismo tiempo llame a la movilización en Catalunya.