El candidato socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Rafael Simancas, se ha comprometido a "no salir investido" el próximo sábado y ha dicho que "la fórmula más probable" para conseguirlo es que los diputados tránsfugas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez no le voten."La fórmula más probable es que estos dos elementos no me voten", ha afirmado y ha explicado que en su discurso de investidura les "exigirá" desde la tribuna de oradores "que no voten a favor", aunque no ha aclarado cuáles son las otras alternativas.En conferencia de prensa en la Asamblea de Madrid, Simancas ha insistido en que es "un persona decente", que quiere conformar un "gobierno decente" y aplicar un "programa decente" y en que "por esa decencia no me dejan gobernar".El candidato ha utilizado buena parte de su comparecencia para enumerar con pormenorizados datos las "escasas propiedades" que tienen él y su esposa --un chalé en Arroyomolinos, un Seat Ibiza, un Seat Toledo y una libreta de ahorros con 30.000 euros-- y ha pedido que "otros portavoces" de los grupos parlamentarios de la Cámara hagan lo mismo.