La apuesta por la cohesión social y territorial del Estado autonómico guiará los trabajos de la conferencia autonómica que el PSOE celebra este fin de semana en Madrid. La dirección del partido sostiene que en este objetivo "están comprometidas todas las sensibilidades socialistas".

Con este cónclave, José Luis Rodríguez Zapatero intenta zanjar las acusaciones del PP sobre la diversidad de discursos territoriales que, denuncian los populares, cohabitan en el PSOE. En este sentido, la dirección socialista ha trabajado para evitar sorpresas en el transcurso de la conferencia, aunque el riesgo no está descartado del todo.

Fuentes socialistas subrayaron que, en lo básico, "hay acuerdo", porque con, unas u otras etiquetas, "todos apuestan por la profundización del Estado de las autonomías". Desde esta perspectiva, agregan, ni el federalismo asimétrico que postula Pasqual Maragall, ni las tesis del alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, en defensa de una estrategia de no enfrentamiento permanente con el PNV, cuestionan la posición central del partido.

Según señalaron ayer el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, y el secretario de Libertades Públicas, Juan Fernando López Aguilar, en la convención prevalecerá el debate, algo que al PP "no le gusta hacer". Ambos dirigentes aseguraron que las autonomías deben devolver a los ciudadanos los derechos "socavados por la política antisocial" del Gobierno de José María Aznar.