La declaración ante el juez como imputado del doctor Carlos Viñals, uno de los encargados de la asistencia médica en una fiesta de Halloween en el Madrid Arena del pasado 1 de noviembre, ha sido suspendida por una lumbalgia.

Así lo ha indicado uno de los abogados de las víctimas de la tragedia, antes de la declaración también como imputado del representante de Kontrol 34, Carlos Manzanares, ante el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de cinco jóvenes en el Madrid Arena el pasado 1 de noviembre.

A primera hora, las partes han visto un DVD con imágenes de la enfermería tomadas por la Policía Científica para comprobar cuál era el equipamiento y la situación de los cadáveres de tres de las víctimas en parada cardiorrespiratoria.

María José Siñeriz, la abogada de la familia de Cristina Arce, una de las víctimas de la tragedia, ha mostrado su deseo de aclarar cuáles eran las funciones de los trabajadores de Kontrol 34 en el pabellón la noche de los hechos.

Por su parte, Abdón Núñez, el letrado de la familia de Belén Langdon, otra de las víctimas, ha expresado su interés en acreditar que el contrato entre Diviertt y Kontrol 34 aportado a la causa es posterior al evento.

Felipe Moreno, el representante legal de la familia de Rocío Oña, otra de las víctimas, ha señalado que quiere aclarar si los empleados de Kontrol 34 ejercían funciones de seguridad en el interior del recinto y no solo eran controladores de acceso, a la vista de los indicios y datos que han surgido a lo largo de la instrucción.

Carlos Manzanares comparece hoy ante el juez por segunda vez, tras hacerlo en primer término el 21 de noviembre del año pasado, cuando se desvinculó de las labores de seguridad en la fiesta de Halloween.