El Tribunal Constitucional ha reconocido el derecho de huelga a los inmigrantes aunque trabajen de forma irregular. Por ello ha declarado inconstitucional el artículo 11.2 de la ley que aprobó el Gobierno de José María Aznar en el 2000, que solo reconocía este derecho a los trabajadores extranjeros legales. El tribunal da así un vuelco a la legislación del PP. Hace un mes ya declaró inconstitucionales los preceptos que impedían a los ilegales el derecho de sindicación, a la asistencia gratuita y a la educación.

El tribunal explica que el derecho de huelga es un derecho universal que no se puede otorgar solo "en razón de la nacionalidad o de la situación administrativa".