Los temblores que amenazan desde hace años la unidad del PP valenciano se elevaron ayer a terremoto político tras el anuncio de uno de sus diputados en el Parlamento autonómico de que abandona el Grupo Popular y pasa a ser el único miembro del Mixto. Francisco Tomás, alcalde de L´Alcora (Castellón) entre 1995 y 2003, se ha afiliado a Coalición Valenciana (CV), un partido ultraderechista cuya principal seña de identidad es un visceral anticatalanismo.

Tomás puso "a disposición de CV, todo" su "activo político y personal, incluyendo el escaño y el acta de concejal" de L´Alcora, "con todos los recursos públicos que les son inherentes". Tomás será así la voz del blaverismo en el Parlamento valenciano.

El portavoz del Gobierno valenciano, Esteban González Pons, le calificó de "traidor indecente", y a toda la trama, de "operación de coge el dinero y corre" porque es "la primera vez en la vergonzosa historia del transfuguismo" que un político "confiesa abiertamente" que "se lleva el dinero". González Pons lanzó una enigmática idea: "Imagínense a un grupo de constructores que se asocia para envolver el pase de un diputado al Grupo Mixto".