Trece personas han sido detenidas en Castilla-La Mancha por formar parte de una trama internacional que defraudó 5 millones de euros en el IVA de productos electrónicos mediante una compleja estructura de sociedades en España, Portugal, Chipre y otros países europeos.

La Agencia Tributaria ha dado por desarticulada la organización con la detención de los principales implicados, cómplices y los testaferros que colaboraban en la creación de la trama de sociedades instrumentales dentro de España y en el extranjero a través de las que se canalizaba el fraude que se inició en 2011.

El juez encargado del caso ha decretado prisión provisional sin fianza para dos de los detenidos, identificados como P.V.J.Z. y V.B.S.M., mientras que el resto ha quedado en libertad con cargos, ha informado la Agencia Tributaria.

La operación "Familia" culminó el pasado 25 de junio en Tomelloso (Ciudad Real) con la mayoría de las detenciones, al tiempo que se efectuaron 13 registros domiciliarios en las provincias de Ciudad Real (6), Guadalajara (2) y Madrid (5), en las que se incautó de abundante documentación sobre la trama.

Además de los registros, en los que se intervinieron 45.000 euros, durante la operación se adoptaron otras medidas cautelares como el bloqueo de 140 cuentas bancarias de los supuestos implicados en la trama y de las empresas instrumentales utilizadas.

La operación fue iniciada por la Delegación Especial de la Agencia Tributaria en Castilla La Mancha en torno a una de las sociedades utilizadas por la organización y en la investigación obtuvo indicios de que la sociedad era "un mero instrumento" dentro de un compleja estructura empresarial defraudatoria con presencia en España, Portugal, Chipre y otros países europeos.

La Agencia Tributaria denunció los hechos, con el apoyo de la Fiscalía de Ciudad Real, y el Juzgado de Instrucción número 3 de Tomelloso (Ciudad Real) ha llevado a cabo la instrucción.

Según la investigación, para llevar a cabo la actividad defraudatoria, que se concentraba en el sector de la electrónica, los productos eran facturados por los proveedores a empresas instrumentales (llamadas "truchas remotas") creadas en Portugal y otros países europeos, pero realmente la mercancía se transportaba directamente a España.

Las empresas instrumentales europeas se limitaban a refacturar a sociedades instrumentales españolas, que realmente tampoco recibían las mercancías y que, a su vez, volvían a facturar, pero en esta ocasión a empresas distribuidoras reales.

Según la Agencia Tributaria, las "truchas" españolas repercutían el IVA en sus entregas de mercancía dentro de España a los distribuidores reales, pero ese IVA no lo ingresaban en Hacienda.

Dado que, de acuerdo con la normativa comunitaria del IVA, no procede pagar este impuesto indirecto en las compras intracomunitarias, pero sí en las ventas en España, las "truchas" españolas tendrían que ingresar unas cantidades de IVA muy elevadas, al no soportar este impuesto en sus adquisiciones a las sociedades instrumentales europeas y sí repercutirlo en sus ventas a las distribuidoras en España.

Sin embargo, para falsear el circuito del IVA, la trama simulaba en las declaraciones tributarias unas cuotas de IVA soportado que eran ficticias, ha explicado la Agencia Tributaria.

Además del fraude en electrónica, los acusados han llevado a cabo estas practicas ilegales en la comercialización de neumáticos de primeras marcas, accesorios de motos, aparatos de gimnasia y servicios telefónicos, entre otros productos comerciales.

En estos casos la trama, de nuevo mediante sociedades "truchas", falseaba entregas de mercancía de España a Portugal exentas de IVA, cuando realmente los productos se distribuían directamente en España facturándose a bajo precio gracias a la falta de ingreso del IVA en la Hacienda Pública.

Las empresas que adquirían estos productos de las "truchas" se deducían posteriormente ese IVA no ingresado, beneficiándose de los bajos precios con los que podían adquirirlos por el margen que otorga la defraudación del IVA.

Según la Agencia Tributaria, esta actividad estaba amenazando al resto de empresas del sector, que no podían competir con tales precios. La operación continúa abierta y no se descartan más detenciones.