El presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), Fernando Ruiz Piñeiro, pidió ayer el amparo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) porque se siente acosado y deslegitimado tras haber iniciado un proceso contra el lendakari por reunirse con Batasuna el 19 de abril del año pasado. Ruiz Piñeiro explica que desde junio del 2006 --cuando decidió imputar a Ibarretxe-- la sala que preside ha sufrido "expresiones de vejación, insulto, acusación de golpismo y velada acusación de prevaricación" por parte de dirigentes políticos e institucionales y medios de comunicación.

El presidente del TSJPV cree que esta actitud "no va a disminuir o rectificarse" y sostiene que hasta ahora "nunca" había asistido "a una campaña tan intensa y prolongada de acoso y deslegitimación", no solo en el País Vasco, sino "en todo el ámbito del Estado". Esos ataques, dice, pretenden "inquietar o perturbar la independencia y el sereno ejercicio" por parte del tribunal que preside "de la función jurisdiccional que constitucionalmente tiene encomendada".

El pleno del consejo general examinará hoy este escrito. El TSJPV también debe resolver otras denuncias del PP y el Foro Ermua contra los dirigentes socialistas Patxi López y Rodolfo Ares.