El controvertido tuit del PP, que enlazaba un vídeo de un humorista en el que un niño pedía, indirectamente, a los Reyes Magos la muerte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, puede llegar a caer en manos de la Justicia. La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, anunció ayer que ya ha contactado con la ministra titular de la cartera, Dolores Delgado, para que traslade a la Fiscalía General del Estado el apunte publicado en la cuenta oficial de los populares, aunque ya haya sido eliminado. La fiscalía deberá estudiar si su contenido es constitutivo de delito y, si lo fuera, procedería penalmente contra los autores y los que le dieron difusión pública, explicó la Moncloa.

La retirada del tuit y las disculpas del PP se sucedieron tras el alud de críticas de los internautas y del resto de formaciones políticas. «Borramos y pedimos disculpas por el tweet anterior. No era nuestra intención ofender ni desear mal a nadie. Ha sido un error. Felices Reyes Magos a todos», escribieron los conservadores. Ante el anuncio de Calvo, fuentes del PP respondieron que la vicepresidenta parece que «no se ha enterado» de que el vídeo ha sido «retirado» y de que el partido ha «pedido disculpas».

En el audiovisual del humorista Ignacio de la Puerta, un niño pide a los Reyes Magos que «se lleven» al presidente al igual que a personas ya fallecidas. «Mi actor favorito era Robin Williams, y te lo llevaste. Mi humorista favorito era Chiquito de la Calzada, y también te lo llevaste. Solo te escribo esta carta para decirte que mi presidente favorito es... Pedro Sánchez». El tuit del PP que acompañaba la grabación repetía esta última frase.

De la Puerta salió al paso de las críticas y aseguró que «no tiene la culpa» de que el PP comparta su vídeo. Pidió disculpas a los que se sintieron ofendidos y aseguró que se trata de un chiste que «ha pasado de generación en generación». Añadió que el vídeo es «ficción» y que «jamás le desearía la muerte» a nadie, por lo que reclamó «no dramatizar».

Por su parte, la secretaria de comunicación del PP, Isabel Díaz Ayuso, se desmarcó del tuit de su partido y aseguró que «no es su responsabilidad». En respuesta a diferentes comentarios que la señalaban como la ideóloga del apunte, afirmó que estaba «muy mal ese vídeo» y que era «lamentable». «Quien haya compartido ese vídeo ha metido la pata», admitió en Twitter.

Eso no esquivó los reproches del resto de partidos. El PSOE fue el primero en protestar y desde su perfil oficial sentenciaron que «los partidos políticos están para algo más que para desear la muerte al presidente del Gobierno». El secretario de organización de Podemos, Pablo Echenique, deploró la exposición: «Los que se llenan la boca con las tradiciones cristianas las denigran, usándolas para odiar y desear la muerte de sus adversarios políticos», espetó. También censuró su difusión el líder de IU, Alberto Garzón.