Los cambios nunca son bruscos y el País Vasco no era en el 2001 "radicalmente nacionalista" ni en el 2008 ha dejado de ser nacionalista de la noche a la mañana. Con esa reflexión, aludiendo a las elecciones autonómicas de hace siete años y a las legislativas del pasado marzo, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, reclamó ayer a José Luis Rodríguez Zapatero y al conjunto de los socialistas vascos que no busquen ganar tiempo, sin buscar ningún acuerdo, para tratar de derrotar al lendakari, Juan José Ibarretxe, en las próximas elecciones vascas aprovechando el tirón de las generales.

Urkullu advirtió de que el PNV está dispuesto a llegar a un "choque de locomotoras" en la precampaña y en la campaña electoral si los socialistas persiguen solo alcanzar el poder. Pero los nacionalistas quieren llegar antes a algún compromiso sobre la consulta que pide Ibarretxe y que concretará en junio. Para ello Urkullu ofreció tranquilidad. "No se va a plantear ninguna barbaridad", aseguró.

El presidente del PNV dio muestras del debate interno de los nacionalistas vascos. En el foro de Europa Press, Urkullu se refirió a las posiciones de otros dirigentes del PNV, como el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, quien ha dado por "caducado" el Gobierno tripartito en el País Vasco. Para Urkullu, son los dos socios, Eusko Alkartasuna (EA), y Ezker Batua-Berdeak (EBB) los que están cuestionando esa fórmula de Gobierno.

Lejos de matizar a Bilbao, incidió en que el PNV desea acercarse a los socialistas, lo que facilitaría acuerdos en el Congreso. Lo que ocurre es que los peneuvistas no admiten que Zapatero trate de aprovechar la situación. El mensaje es que las generales las ha ganado Zapatero y no el líder del PSE, Patxi López, y que en las autonómicas solo el PNV defiende el País Vasco.

IMPUTACIONES Por otra parte, el juez Baltasar Garzón ha aceptado la petición del letrado del dirigente peneuvista Gorka Agirre, imputado en el sumario que investiga las cuentas de ETA, y ha citado a declarar al presidente del PNV, Iñigo Urkullu; al de Guipúzcoa, Joseba Egibar, y al expresidente Xabier Arzalluz.