En un acto con afiliados en Chipiona (Cádiz), Mariano Rajoy hizo un repaso a la política nacional: el diálogo social, la financiación autonómica, la ley del menor... Hasta habló de los chiringuitos. "Nuestras playas sin ellos serían otra cosa", dijo. Pero ni una palabra del caso Gürtel. Solo un comentario de soslayo en el que lanzaba una crítica al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. "Vamos bien en el partido y nos va a ir mejor en el futuro a pesar de los estratosféricos esfuerzos de algunos para hacer lo posible y, si pueden, lo imposible para que esto sea así, pero no lo van a conseguir", aseguró el líder conservador.

Uno de los temas en los que más abundó Rajoy en su alocución fue la visita del martes de Miguel Angel Moratinos a Gibraltar. "Es el primer ministro en la historia que hace una visita oficial a su propio país", dijo el presidente del PP. Rajoy considera que el titular de Exteriores ha hecho el "indio" ante las autoridades del Peñón.