El entusiasmo le llevó a asegurar que iban a obtener un diputado más en Extremadura. Lo lanzó en el mitin que Pedro Sánchez organizó en Badajoz como principal acto de campaña en la comunidad: «Lo dije en Mérida antes de las elecciones autonómicas, que llegábamos a la mayoría absoluta, y no me equivoqué. Ahora afirmo que vamos a sacar uno más», subrayó Guillermo Fernández Vara. Pero esta vez el presidente de la Junta y secretario general del PSOE en la región erró en los cálculos. No es solo que su partido no haya obtenido un asiento más en el Congreso ni por Cáceres ni por Badajoz, es que además la repetición de elecciones orquestada por Sánchez ha hecho que los socialistas extremeños se dejen en el camino más de 23.000 votos, el 9% de los apoyos. La cifra es mínima, pero hay que ponerla en contexto: el PSOE volvía a llevar al país a las urnas para mejorar sus resultados.
El objetivo no se ha conseguido, pero aún así siguió siendo la fuerza más votada y con mayor número de escaños. Por ello, Fernández Vara pidió ayer desde Extremadura «la abstención generalizada» de todos los partidos para que su líder nacional «pueda formar gobierno cuanto antes».
Vara, que compareció acompañado de los diputados y senadores electos de su partido por ambas provincias, recordó: «Tras las elecciones de 2016 dije que había que dejar gobernar a Mariano Rajoy porque había ganado, ahora manifiesto lo mismo, que hay que dejar gobernar a Sánchez», recordó Fernández Vara, que entre las diferentes opciones que se pueden barajar se decantó por un gobierno en solitario del PSOE con apoyos puntuales.
REACCIONES DE CS / Quien también se manifestó ayer en plena resaca electoral por la dimisión de su líder fue el presidente de Ciudadanos en Extremadura, Cayetano Polo, quien dijo de Albert Rivera: «Hoy es un día triste, no solo para Ciudadanos, porque se marcha de la política probablemente el mejor político que ha habido en España en las últimas décadas». «Se va un señor que nos ha dado a todos una lección de coherencia y de integridad», agregó.
La deblace de la formación también llegó a la comunidad con la pérdida de sus dos diputadas (una por Cáceres y otra por Badajoz).
ALERTA DESDE TRIÁNGULO / Además de la victoria agria del PSOE y la hecatombe de los naranjas, la tercera noticia de la jornada electoral fue el avance de la ultraderecha, que también provocó ayer reacciones. Vinieron desde la Fundación Triángulo, entidad que lucha por la igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales. Hicieron un llamamiento «a la responsabilidad de las principales fuerzas políticas de la región ante el auge de la extrema derecha». «Hay que priorizar la protección de quienes son objeto de discursos de odio en cualquier situación», apostillaron.
La cuarta noticia, y quizá el resumen de todo, es que el 10-N ha dejado un paranomara aún más difícil para formar gobierno. En este sentido se pronunció ayer la secretaria general de CCOO en Extremadura, Encarna Chacón. Resumió: «Se debe conformar un Gobierno de progreso que nos devuelva la tranquilidad a todos».
