"Se ha movido toda la casa, ha sido un susto como nunca". Los vecinos de la calle de San Pedro de Bergara (Guipúzcoa), en la que anoche explotó una potente bomba colocada en los Juzgados, lamentaban hoy los daños causados en las viviendas y comercios por la onda expansiva del artefacto.

"Salté de la cama, se movía toda la casa, que es una casa vieja", relata un hombre de unos 65 años, quien explica que la explosión, que se registró sobre las 00.20 horas, le causó "un susto como nunca" que, sin embargo, no le impidió intuir de inmediato qué había pasado: "Se movía todo, mi mujer me ha preguntado '¿qué ha sido?' y enseguida le he contestado: 'una bomba'".

Los cristales diseminados por el asfalto de la calle de San Pedro, junto a la que se ubican los Juzgados de Bergara, daban testimonio esta mañana de la importancia de la explosión, que ha desencajado ventanas de las viviendas próximas, ha destruido lunas de comercios y ha causado visibles daños en unas decenas de coches aparcados en las proximidades del inmueble atacado.

El edificio de los Juzgados, que tiene los cristales rotos, la puerta arrancada y en cuyo interior se observan escombros, está situado en el casco antiguo de Bergara, en el centro de la localidad, justo al lado de la Iglesia de San Pedro, cuyo reloj parado marca las 00.17 horas. Un trabajador de una empresa de instalaciones eléctricas de Ordizia (Guipúzcoa) aguardaba a la grúa para que retirase una furgoneta del trabajo, que además de tener las lunas rotas, había sufrido averías que le impedían arrancar.

"Me di cuenta al momento, intuí que el 'pepinazo' era en el Juzgado y sabía que algo tendría la furgoneta", relata este vecino, quien también pudo escuchar la explosión desde su domicilio. Otros afectados se han llevado la sorpresa esta mañana, como una carnicera residente en Antzuola, quien admite haberse pegado "un susto" cuando ha acudido a primera hora a abrir su negocio en Bergara y ha observado a los periodistas que cubrían la información. "Ahora tendré que ir a la Ertzaintza porque la puerta de la carnicería tiene todo el cristal roto".