La decisión del PP de vetar las "empresas controladas por Polanco" hasta que el presidente del Grupo Prisa rectifique la afirmación de que es difícil estar de acuerdo con algunos partidos "en unos momentos en que hay quien desea volver a la guerra civil" ha provocado la reacción de la prensa española.

Los trabajadores del Grupo Prisa reprobaron el llamamiento al boicot del PP "para perjudicar los intereses de este grupo de comunicación", la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) lamentó "la desmesura" de recientes declaraciones y decisiones que afectan al libre ejercicio del periodismo y el Colegio de Periodistas de Cataluña recordó que "no se puede restringir el derecho y el deber de informar de los periodistas" .

El PP anunció hoy que mientras el presidente del Grupo Prisa, Jesús Polanco, no rectifique pública e inequívocamente sus declaraciones contra este partido "dejará de atender todas las convocatorias de entrevistas, tertulias y programas de este grupo y demás empresas controladas por Polanco".

Jesús de Polanco afirmó ayer que es "muy difícil" estar de acuerdo con la acción política de algunos partidos, especialmente "en unos momentos en que hay quien desea volver a la guerra civil" y consideró que si la derecha española "recupera el poder, van a venir con unas ansias de revancha que me dan mucho miedo".

Polanco aseguró que si hubiera un partido "de derechas y laico, le apoyaríamos porque es lo que hace falta" en este país, un partido de derechas que entienda la alternancia en el poder como "un cambio de gestión natural".

"Declaraciones intolebrales"

En un comunicado leído por el secretario de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga, este partido calificó las declaraciones del presidente del Grupo Prisa de "intolerables" y consideró que "imputa comportamientos, actuaciones e intenciones abiertamente antidemocráticos".

"Dichas declaraciones van mucho más allá del legítimo posicionamiento editorial y de la crítica ideológica", señaló el PP, que añadió que las afirmaciones de Polanco "desvanecen cualquier pretensión de imparcialidad del Grupo Prisa y comprometen la capacidad de cualquiera de los medios que lo integran de informar de manera veraz y objetiva".

Además, los populares consideraron que estas declaraciones son también una "agresión injustificada contra millones de españoles que se ven reflejados en los valores de libertad y democracia que representa y defiende el Partido Popular".

Por todo ello el PP, dijo Gabriel Elorriaga, comunica a los ciudadanos y de manera especial a los accionistas, anunciantes y clientes de ese grupo de comunicación que "desde este momento y mientras el señor Polanco no rectifique pública e inequívocamente, el Partido Popular dejará de atender todas las convocatorias de entrevistas, tertulias y programas del Grupo Prisa y demás empresas controladas por Jesús Polanco".

"Ataque preventivo"

El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, aseguró sobre esta iniciativa del PP de no atender a los medios del Grupo Prisa, que el líder del PP, Mariano Rajoy, "ha ido más lejos de lo que nunca se han atrevido" los anteriores presidentes del partido, José María Aznar y Manuel Fraga.

Blanco consideró que esta maniobra del PP no es más que "otro ataque preventivo" que, por otra parte, es "la primera vez que se produce en toda la historia de la democracia española". "Rajoy ha ido más lejos de lo que nunca se han atrevido Aznar o Fraga", apostilló.

Los trabajadores del Grupo Prisa reprobaron, en un comunicado, el llamamiento al boicot que hizo el PP para perjudicar los intereses de este grupo de comunicación y lamentaron que el principal partido de la oposición intente cuestionar la profesionalidad de las más de 14.000 personas que trabajan en Prisa.

El comunicado explica que Polanco "ejerció su legítimo derecho a la libertad de expresión", por lo que considera que la respuesta del PP es "inaceptable".

"El principal partido de la oposición ha demostrado su incapacidad para encajar la legítima crítica, poniendo incluso en riesgo los puestos de trabajo de una empresa privada, en su afán por aumentar el nivel de crispación en la sociedad española", subrayó el comunicado.

La Asociación de la Prensa de Madrid (APM) hizo un llamamiento a los partidos políticos para que no limiten el acceso de los periodistas a la información a la vez que lamentó "la desmesura" de recientes declaraciones y decisiones que afectan al libre ejercicio del periodismo.

Elorriaga respondió a la APM y dijo que su partido "no va a limitar en modo alguno el acceso a la información de todos los medios de comunicación" y expresó su "absoluto respeto" por los lectores, oyentes y espectadores y por los profesionales del Grupo Prisa.

El Colegio de Periodistas de Cataluña tachó de "inadmisibles" las medidas acordadas por el PP contra el grupo de comunicación Prisa y recordó que "no se puede restringir el derecho y el deber de informar de los periodistas".