Los toros de Victoriano del Río, de Guadalix de la Sierra (Madrid), han corrido hoy el encierro más rápido de los sanfermines 2013, que han finalizado en 2 minutos y 11 segundos, y que ha sido muy peligroso, ya que por su velocidad han atropellado a muchos mozos durante el recorrido.

Los astados han realizado todo el recorrido hermanados y conducidos por los mansos, aunque la rapidez de los toros madrileños ha provocado numerosas caídas y momentos de peligro al superar los animales a los corredores debido a su gran velocidad, si bien hoy tampoco ha habido heridos por asta.

Cuando las campanas de la iglesia de San Cernin han marcado las ocho en punto, los dos cohetes que anuncian la salida de los toros han sonado en el cielo pamplonés y en ese momento la manada ha partido de los corrales de Santo Domingo ya hermanada desde el inicio.

Los victorianos han establecido contacto con los mozos de forma limpia y han comenzado a coger velocidad mientras alguno de los morlacos miraba hacia su izquierda pero sin hacer por los mozos, que hoy se han dado cita en este punto en menor número que en días anteriores.

Un toro se ha adelantado a la manada mediada la cuesta de Santo Domingo y ha forzado aún más la velocidad de sus hermanos, lo que ha provocado los primeros trompicones de los mozos, superados por la rapidez con la que iban los astados.

De esta forma, con el toro negro adelantado y el resto de la manada agrupada con los cabestros por detrás, los bureles han recorrido la plaza del Ayuntamiento y la calle Mercaderes a una velocidad notable.

La torada ha tomado la curva de Mercaderes de manera muy limpia, sin caer ni chocar con el vallado, superando sin incidencias a un corredor que había quedado tendido sobre el adoquinado.

Al inicio de Estafeta se ha vivido un momento de gran peligro cuando un joven se ha visto entre las astas de uno de los victorianos, que le ha arrollado aunque sin llegar a cornearle.

En Estafeta los cabestros se han ido situado al frente de la manada, que han conducido por el centro de la calle, aunque uno de los bureles ha lanzado derrotes hacia la parte izquierda, donde se habían apostado gran cantidad de mozos en el encierro de hoy.

Encabezada por tres mansos, la manada ha recorrido el tramo de Telefónica, donde un toro ha perdido las manos y ha caído al suelo, aunque se ha levantado sin mayores consecuencias y ha alcanzado con rapidez al resto de sus hermanos.

La manada, estirada y con un toro algo retrasado cerrando el grupo, ha entrado en la plaza y ha sido conducida a los chiqueros por los dobladores sin incidencias.

Este cuarto encierro ha sido el más rápido de los sanfermines 2013, en los que por el momento no se han registrado heridos por asta de toro.