El proceso de excarcelación de Enrique Rodríguez Galindo ha levantado ampollas en el Gobierno vasco. El consejero de Justicia, Joseba Azkarraga (EA), denunció ayer que el exgeneral, condenado a 75 años de prisión por el secuestro, tortura y asesinato de los etarras José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala, es un "privilegiado". Acusó al Gobierno socialista de utilizar una "doble vara de medir" a los presos y dijo que para el PSOE existe un terrorismo "bueno", el del GAL, y otro "malo", el de ETA. Azkarraga recordó que hay otros presos "enfermos graves" a los que no se atiende igual.

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, dijo que el Gobierno debe dar "muchas explicaciones". PNV, ERC y EA anunciaron que exigirán explicaciones en el Congreso por la decisión de Instituciones Penitenciarias. Denunciaron una "amnistía encubierta". El ministro del Interior, José Antonio Alonso, dijo ayer que el tratamiento otorgado al exgeneral se acomoda "perfectamente" a la Constitución y a la legalidad.

Por su parte, el exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra matizó ayer que la sociedad española "le debe mucho" a Rodríguez Galindo.