La reapertura de la causa contra Juan María Atutxa, presidente del Parlamento vasco, ha provocado un nuevo enfrentamiento entre el PNV y los jueces. Josu Jon Imaz, líder de los peneuvistas, arremetió ayer contra la sala del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que ha decidido proseguir las actuaciones contra Atutxa por desobedecer al Supremo al no disolver el grupo parlamentario de Batasuna. Imaz acusó además al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de "hacer política" con intereses "partidistas".

CUBRIR LA PLAZA VACANTE La andanada del líder de los peneuvistas se produjo justo antes de conocerse que el CGPJ había decidido rechazar la terna de juristas que el Parlamento vasco le remitió en noviembre a fin de que nombrara a uno de ellos para cubrir una plaza vacante en la Sala de lo Penal del Tribunal Superior. Esta instancia es, precisamente, la que se encarga de juzgar a los aforados, como Atutxa (PNV) y los miembros de la Mesa del Parlamento vasco, Gorka Knörr (EA) y la secretaria, Kontxi Bilbao (EB).

La mayoría conservadora del Consejo impuso su criterio e impidió el nombramiento de alguno de los tres candidatos preferidos por el PNV, los abogados Arantza Isasmendi, Anton Subinas y Ricardo Sanz. Tras cuatro votaciones, ninguno obtuvo obtuvo los 11 apoyos necesarios para salir nominado y la terna será devuelta al Parlamento.

Dado que el legislativo está ya disuelto, la decisión tendrá que demorarse hasta que se constituya la nueva Cámara. Esto asegura que la vacante en el Tribunal no será ocupada por alguien afín al nacionalismo antes de que se celebre el juicio contra Atutxa, Knörr y Bilbao.

"La interferencia de la política en la justicia no ha terminado en este país", se quejó Imaz. Su denuncia no se detuvo en la decisión del alto tribunal vasco de reabrir el caso Atutxa a instancia de una organización "ultraderechista" como el sindicato Manos Limpias cuando el fiscal ha considerado correcto el archivo.

MAYORIA CONSERVADORA El presidente del PNV recordó que ha sido el CGPJ el que ha garantizado una mayoría conservadora en la Sala de lo Penal del tribunal vasco, que ahora mantiene su "actuación política" dedicándose a servir a "intereses partidistas" más que a "gobernar la justicia". Imaz dijo no temer que le acusen de "deslegitimar" la justicia: "El Consejo se vale a sí mismo para desacreditarse", espetó el presidente del PNV.

El PP se quedó solo al defender la reapertura del caso Atutxa y criticar al fiscal general del Estado. El ministro del Interior, José Antonio Alonso, y el de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, defendieron la solvencia y autonomía de Cándido Conde-Pumpido en su decisión de no recurrir contra el archivo del caso.