La negativa rotunda del líder del PP, Pablo Casado, a apoyar la moción de censura planteada por Vox y su ruptura con esta formación ha provocado una tormenta en Andalucía, donde los conservadores gobiernan en coalición con Cs y el apoyo fundamental de la ultraderecha. La formación de Santiago Abascal ha anunciado la suspensión de la reunión sobre el proyecto de presupuestos autonómicos para 2021, prevista para esta tarde. En su lugar, celebrarán una rueda de prensa para analizar el ritmo de las negociaciones, según han indicado.

La negociación de los presupuestos está ya en su última fase, a punto de ser aprobada y llegar al Parlamento andaluz para su debate. En las últimas semanas, pese a los ofrecimientos de mano tendida a todos los grupos políticos, se ha evidenciado que de nuevo Vox volvía a ser socio preferente, según los reproches de PSOE y Adelante Andalucía. Y desde la formación de ultraderecha se había garantizado no pocas veces el apoyo en aras a la estabilidad de la comunidad.

Sin embargo, todo eso ha saltado este jueves por los aires con las intervenciones de la moción de censura. Y eso, pese a que el propio Abascal ha asegurado en su intervención que no habría ruptura en los gobiernos que apoyan, mandando un mensaje de tranquilidad a andaluces, murcianos y madrileños.

Nada más concluir la dura intervención de Pablo Casado, el portavoz parlamentario de Vox Andalucía, Alejandro Hernández, lanzaba un mensaje de aviso: lo que se siembra es lo que luego se recogerá. Además, arremetía contra el principal partido de la oposición porque ha conseguido lo nunca visto: el aplauso unánime de Podemos y PSOE con los grupos políticos que quieren destruir España. Unas palabras que coincidían en el tiempo con un mensaje lanzado en redes sociales por el PP andaluz, en los que se podía leer Sí a España, no a Vox que la formación borró al cabo de una hora.

No es la primera vez que desde grupo de ultraderecha se tensa la cuerda de los presupuestos, ya que la suma de votos de PP y Cs es insuficiente frente al bloque de PSOE y Adelante Andalucía, por lo que los 12 votos de Vox son vitales para cualquier iniciativa de Ejecutivo, más aún para el principal proyecto de ley. Con las cuentas de 2020, lograron arrancar la puesta en marcha del pin parental, luego frustrado Y en los de 2019, impusieron el teléfono de violencia intrafamiliar o la reprogramación del gasto en memoria histórica.

Por este motivo, Hernández reconocía en una entrevista televisiva este mismo jueves que no renunciarían a dejar su impronta en las cuentas de 2021. Es más, recordaba que su formación tiene distintas opciones para influir en la política andaluza, como por ejemplo la moción de censura contra el presidente andaluz. Vox tiene tres alternativas para influir en la política andaluza: la primera, hablar con el PSOE y plantear una moción de censura contra el Gobierno de Juanma Moreno; la segunda, no apoyar los Presupuestos y, de ese modo, complicar la gobernabilidad y dirigirnos a un escenario de elecciones, y la tercera, que es la de un partido serio, apoyar los Presupuestos.

Desde el ejecutivo andaluz tratan de quitar importancia a este nuevo encontronazo, y aseguran que no hay nada roto y el acuerdo entre las tres formaciones sigue vigente. Y apuntan a que la reunión se ha trasladado a la semana que viene, demostrando que el aviso de Vox es más una advertencia que una amenaza seria.