Vuelco electoral: gana el PP y pierde el resto. Es el principal resultado de unas elecciones históricas celebradas solo seis meses después de los últimos comicios generales. El Partido Popular recuperó ayer parte de los votantes perdidos el pasado diciembre y logra arrebatar la victoria al PSOE en Extremadura. El sorpasso extremeño que auguraba el líder regional del PP, José Antonio Monago, se ha cumplido. En medio año suma 17.000 votos más y sube hasta los 244.000: el 39,9% en total.

Así, con el 99% escrutado, casi 40 de cada 100 extremeños que ayer acudieron a las urnas votaron a los populares, 34 introdujeron una papeleta socialista, 13 de cada 100 votaron a Podemos y otros 10 lo hicieron a Ciudadanos.

Los comicios demuestran que el bipartidismo (con el 74% del total de las papeletas) sigue resistiendo en Extremadura aunque el hito histórico que logró Podemos el pasado 20 de diciembre se mantiene --desde 1984 PSOE y PP se repartían el pastel--. La formación morada conserva a su diputada en el Congreso por Badajoz, el puesto que ocupa la médico pacense Amparo Botejara, y los nueve diputados restantes se los siguen repartiendo entre las dos fuerzas tradicionales, aunque eso sí, esta vez cambiando las tornas: cinco diputados para el PP y cuatro para el PSOE. Justo al contrario que hace solo seis meses. El popular Pedro Acedo Penco, el exalcalde de Mérida, que se quedó a las puertas el pasado 20 de diciembre, tiene asiento asegurado. Ocupará el asiento de la diputada socialista Patricia Sierra.

La victoria de los populares se sucede principalmente por el incremento de votos, pero también gracias al pinchazo del PSOE extremeño. La formación que lidera en la región el socialista Guillermo Fernández Vara pierde 21.600 votos respecto al pasado diciembre y se queda con el 34,6% de los votos: 211.000.

No es el único que se desinfla en Extremadura, a los partidos emergentes también le han pasado factura la repetición de los comicios. Podemos logra conservar su diputada pero con 2.300 votos menos que en diciembre pese a la alianza con IU. Unidos Podemos consigue 79.800 papeletas frente a las 102.000 que logró la suma de Podemos e IU hace medio año.

Ciudadanos es la fuerza emergente que más pierde, porque además de quedarse por segunda vez consecutiva sin lograr representación en el Congreso de los Diputados, se desinfla hasta los 64.000 votos frente a los 73.700 de hace solo un semestre, lo que supone 9.700 menos.

OTROS QUE SUBEN Además del PP, los únicos partidos que suman apoyos en la región son Pacma (logra 4.300 votos, 900 más en seis meses), Recortes Cero-Grupo Verde (1.053, 200 más) y Vox (logra 1.000 papeletas, casi 500 más). A la terna de los que pierden --PSOE, Podemos y Ciudadanos-- se suma UPyD que en estos nuevos comicios consagra su debacle definitiva: apenas 1.000 votos frente a los 2.600 del pasado diciembre.

Los resultados de España, esta vez sí, se repiten en Extremadura aunque con un peso mayor de los partidos tradicionales, lo que demuestra que su poder es más fuerte en la comunidad que en el conjunto del país.

Por provincias, la de Badajoz vuelve a ser la más disputada. El PP arrebata a los socialistas los tres disputados que lograron en diciembre al sumar 10.800 votos más en seis meses, mientras el PSOE se queda con dos escaños y 16.000 votos menos. Podemos, pierde mil diputados pero mantiene a Amparo Botejara. Ciudadanos también baja en 5.000 papeletas y se queda con 40.000.

Por su parte, en Cáceres se mantiene el empate tradicional con dos escaños para el PP y otros dos para el PSOE a pesar de que los populares logran 5.900 papeletas más y los socialistas 6.700 sobres menos. A nivel local, las siete principales ciudades extremeñas se tiñen de nuevo de azul. El PP triunfa en Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia, Almendralejo, Don Benito y Villanueva de la Serena, esta última, la victoria más llamativa.

Respecto a las elecciones autonómicas de hace un año el PP sigue siendo el triunfador de la jornada. Logra superar en 6.000 votos sus resultados del 24 de mayo de 2015 y el PSOE apunta en caída libre con más de 50.000 votos menos en un año.

Esta comparativa evidencia también el despegue de Podemos en la región en el último año. A pesar de perder apoyo ayer, la formación liderada por Alvaro Jaén consiguió 78.900 votos frente a los apenas 50.000 de mayo. Ciudadanos sigue esta misma tendencia, en las autonómicas tuvo 27.800 papeletas y ayer consiguió 63.000.