El yerno del exbanquero Mario Conde, Fernando Guasch Vega-Penichet, ha quedado en libertad, mientras que los otros siete detenidos --entre ellos el propio Mario conde--, por la Guardia Civil continúan en las dependencias de Tres Cantos hasta que mañana pasen a disposición judicial de la Audiencia Nacional.

Fuentes de la investigación han informado de que Guasch Vega-Penichet, marido de la hija de Conde, y que fue arrestado ayer por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civilsigue en el procedimiento en calidad de investigado a la espera de que el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz decida si le cita a declarar.

Los otros detenidos en la operación Fénix son, además de Conde, sus hijos, Mario y Alejandra, el abogado Francisco Javier de la Vega, Francisco de Asís Cuesta, María Cristina Álvarez Fernández y Roland Stanek. todos ellos pasaron la noche detenidos

Eran, según los investigadores, los testaferros del exbanquero en sociedades radicadas en otros países como Reino Unido y Suiza, además de España, que le servía para repatriar el dinero saqueado a Banesto -la Fiscalía Anticorrupción estima en más de 13 millones de euros- a través de préstamos, ampliaciones de capital e ingresos en efectivo.

Durante catorce horas, los agentes de la UCO registraron el domicilio familiar de Conde en Madrid, así como una empresa de aloe vera en Torrejón de Ardoz, un despacho de abogados y un pazo en la provincia de Orense, además de otros inmuebles.

Conde estuvo presente junto a su hijo en el registro de su vivienda en Madrid. Cuando los agentes llegaron a su domicilio el exbanquero Conde no se mostró sorprendido e, incluso, llegó a decir que la Guardia Civil llegaba a su casa "con los deberes hechos".

DEVOLVER EL DINERO

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha dicho que Mario Conde "tiene pendiente" devolver el dinero del que se apropió y las indemnizaciones del caso Banesto, por el que fue condenado, ya que en su día dijo ser insolvente "y ahora parece que esa insolvencia no es cierta".

Catalá ha señalado que "tiene pendiente satisfacer una obligación con el conjunto de la sociedad, fruto de la comisión de un delito hace ya algunos años. Cumplió su pena de cárcel, pero no cumplió con las indemnizaciones, porque decía que era insolvente. Pero ahora perece que esa insolvencia no es tal". El ministro aludía así a la condena a 10 años de cárcel que sufrió Conde por estafa y apropiación indebida el caso Banesto, y también a su reciente detención en relación con un presunto blanqueo de capitales.

"Tiene sanciones pendientes que le obligan a devolver lo defraudado y sin embargo está disponiendo de esos recursos más allá de que vengan de fuera o de dentro. Eso es lo que se está levantando en estos momentos", ha añadido.