El temor a las maniobras dilatorias de las autonomías del PP ha llevado a José Luis Rodríguez Zapatero a adelantar a la próxima semana la celebración de la conferencia de presidentes, prevista para mediados de noviembre. El jefe del Ejecutivo, que se encargará en persona de invitar a los presidentes autonómicos, cuenta con la asistencia a la cita del lendakari, Juan José Ibarretxe, según informaron ayer fuentes gubernamentales.

28 DE OCTUBRE La cita será en Madrid a mediados de la semana que viene. Probablemente el jueves 28 de octubre, una vez que el Congreso haya celebrado la votación de totalidad de los presupuestos del 2005 y antes de que Zapatero vaya a Roma para ir a la cena de los líderes de la UE que el viernes estarán en la firma de la Constitución europea.

La sesión inaugural de la conferencia, encabezada por Zapatero, se celebrará en la Moncloa y, según fuentes oficiales, contará con la presencia de los 17 presidentes autonómicos y de los alcaldes-presidentes de Ceuta y Melilla. Tras este encuentro en la Moncloa, el rey Juan Carlos recibirá a todos los presidentes. El Ejecutivo ha querido implicar al Monarca en estos actos para reforzar su papel institucional, conjurar cualquier sesgo partidista en la cita y, de paso, evitar que algún líder autonómico tratase de excusar su asistencia para torpedear la iniciativa de Zapatero. Porque una cosa es dar calabazas al presidente y otra dar plantón al jefe del Estado.

Esa es una de las razones por las que las fuentes ayer consultadas daban por segura la asistencia de todos los mandatarios autonómicos. Incluido Ibarretxe, de quien Zapatero obtuvo una respuesta alentadora en julio. El lendakari envió, hace un mes, a un consejero vasco a la reunión preparatoria de la conferencia con el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla.

Sevilla confió inicialmente en que este mes, una vez concluido el congreso del partido de Mariano Rajoy, las comunidades del PP se avendrían a celebrar otra sesión preparatoria con una actitud más constructiva.

Tres son los asuntos que Zapatero quiere debatir con sus invitados: la financiación sanitaria, la presencia autonómica en la UE y las reformas de la Carta Magna y los estatutos, acotada la primera y condicionadas las segundas al consenso y al respeto del marco constitucional. El presidente quiere que la cumbre abone la búsqueda de un acuerdo de Estado sobre sanidad que permita afrontar el déficit sanitario de las autonomías.

LA ZARZUELA MATIZA A FRAGA La Casa del Rey salió ayer al paso de unas comprometedoras declaraciones del popular Manuel Fraga. El presidente de la Xunta, que el lunes fue recibido por el rey Juan Carlos, declaró ayer a la cadena SER que el Monarca, en su "papel moderador", está "pidiendo opiniones" a personalidades como él mismo sobre las reformas institucionales anunciadas por el Gobierno. Fuentes de la Zarzuela matizaron que en sus contactos el Rey aborda "muchos temas", sin que haya iniciado una ronda sobre la reforma constitucional.