José Luis Rodríguez Zapatero rehusó ayer confirmar o desmentir que el secretario de Organización del partido, José Blanco, hubiera presentado su renuncia, a raíz del escándalo de la Asamblea de Madrid, y que él la hubiera rechazado, tal y como había trascendido.

El secretario general del PSOE se limitó a asegurar que "en este momento" Blanco tiene el encargo de "liderar y encabezar con todas sus consecuencias" la investigación que se ha abierto en el PSOE sobre los dos diputados traidores, así como sobre la trama político- urbanística que rodea la actuación de Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez.

Zapatero echó pelotas fuera cuando, en rueda de prensa, fue interrogado sobre Blanco. Dijo que su labor al frente del equipo de investigación ha aportado "mucha claridad" y aludió vagamente a la disponibilidad de "todos los compañeros" de la ejecutiva.