Horas antes de que empezara la marcha convocada en Madrid por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) contra un supuesto diálogo del Gobierno con ETA si ésta deja las armas, José Luis Rodríguez Zapatero defendió el recuerdo permanente de todas las víctimas de atentados. El presidente del Gobierno clausuraba en Baeza (Jaén) el curso de la Academia de la Guardia Civil, y aunque sin hacer referencia a la concentración de Madrid, recordó el "zarpazo" que ha recibido el Instituto Armado por parte de ETA y subrayó que "aquellos que perdieron su vida estarán, como todas las víctimas del terrorismo, en el corazón y la memoria de los españoles".

El jefe del Ejecutivo elogió la labor de la Guardia Civil en las tareas de seguridad del Estado, convirtiéndose en uno de los colectivos "que ha rendido un tributo duro y doloroso en vidas y sufrimientos". "Quienes servís a la libertad y seguridad de todos contáis también con la gratitud de todos", agregó. Zapatero destacó la importancia de la Guardia Civil en la lucha contra "el terrorismo viejo, inútil, sanguinario y sin sentido" que, desde hace más de 30 años, "daña a todos", pero también contra el "nuevo terrorismo internacional". "Como el que tan brutalmente nos golpeó hace más de un año", dijo Zapatero en alusión a la masacre del 11-M.

El presidente del Gobierno ratificó ante los 3.200 nuevos agentes y suboficiales de la 110 promoción de la Guardia Civil su compromiso para intensificar la coordinación con la Policía Nacional, a fin de "mejorar" la eficacia de ambos cuerpos.

Entre otras medidas destacan el aumento de plantilla, con la creación de 4.000 nuevas plazas del Instituto Armado y el aumento de la retribución salarial, que será aprobado "antes del verano", así como el "ambicioso programa" que modernizará y "dignificará definitivamente" las casas-cuartel, para lo que se ha previsto una partida de 80 millones de euros para este mismo año.

Zapatero resaltó que los agentes tendrán "cerca" al ministro del Interior, José Antonio Alonso, presente en la ceremonia, así como el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves.

Por su parte, el secretario de Seguridad del PP, Ignacio Astarloa, dijo ayer que las víctimas de ETA indican cómo debe ser "la política de los demócratas para acabar con el terror". Y pidió al Ejecutivo que "rectifique" y "escuche" tanto a este colectivo como a las fuerzas de seguridad.