El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, rechazó ayer implícitamente el ultimátum del PP de que, o acepta en un plazo de siete días la convocatoria de nuevas elecciones a la Asamblea de Madrid, o Esperanza Aguirre optará a la investidura para presidir la comunidad.

Zapatero declaró en Zaragoza, donde asistió a la toma de posesión de Juan Alberto Belloch como alcalde de la ciudad, que no aceptará "ninguna otra alternativa" para solucionar la crisis que no sea la devolución de las actas por parte de los dos diputados traidores, Tamayo y Sáez.