Un frenazo a destiempo que lleva a embestir al coche que hay delante durante un atasco; no respetar la preferencia de otro vehículo a la hora de entrar o salir de una rotonda; o una distancia de seguridad insuficiente durante un día de lluvia o niebla. Son algunas de las situaciones que desembocaron en las casi 43.000 colisiones leves de tráfico sin heridos que se produjeron el año pasado en Extremadura. Son un promedio de 117 al día y un 0,20% más que el año anterior, según datos facilitados por Unespa. De este total, 14.008 de los percances de tráfico sin lesionados tuvieron lugar en la provincia de Cáceres, un 0,63% de incremento respecto al 2017, mientras que en la de Badajoz se contabilizaron otros 28.954, prácticamente la misma cifra que el año anterior.

En todo el país se produjeron 1,93 millones de accidentes de este tipo, un incremento del 0,11% en comparación al ejercicio precedente y el mayor número registrado desde 2010. «Los accidentes de tráfico leves son típicos del tráfico urbano y constituyen una magnitud que refleja la situación económica de un país. En momentos de bonanza se producen más colisiones porque hay una mayor cantidad de vehículos circulando por las calles. En años de crisis ocurre lo contrario: baja la siniestralidad», se precisa desde la patronal aseguradora.

Esta tendencia es a la que apuntan los datos contabilizados durante los últimos años, que revelan que los golpes de chapa tocaron suelo en España en el 2013, con 1,73 millones de percances, y desde entonces no han dejado de crecer año a año, coincidiendo con la paulatina mejora de la economía.

Las estadísticas presentan notables fluctuación dependiendo de la zona geográfica de la que se trate. Si se atiende a la ratio de accidentes en relación a la población residente, los lugares donde parece que resulta más complicado conducir son Melilla (5.320 colisiones por cien mil habitante), Baleares (5.220), Málaga (5.080), Cantabria (5.030) y Santa Cruz de Tenerife (4.650).

Por contra, donde la siniestralidad en relación a las cifras de habitantes es más baja es en Teruel (2.780), Zaragoza (3.210), Ceuta (3.300) y Guipúzcoa (3.320). Extremadura se sitúa en la zona intermedia de la tabla —en décima posición entre todas las autonomías—, con 4.030 colisiones registradas por cada cien mil habitantes.

Por días de la semana

Por otro lado, la estacionalidad por días de la semana es también un reflejo del comportamiento colectivo que se sigue a la hora de conducir. Lunes y viernes son las jornadas donde la probabilidad de tener un golpe de chapa es más elevada. En el caso extremeño, manda el primer día de la semana, con una media de 99 siniestros en Badajoz y 48 en Cáceres, por encima de los viernes, donde los promedios son de 94 y 46, respectivamente. En el extremo contrario, los fines de semana son los días más tranquilos, en especial los domingos, cuando los percances caen a la mitad (64 en toda la región).

En el agregado nacional, aparecen algo por encima los viernes, con 6.351 accidentes leves, frente a los 6.251 de los lunes. A lo largo del 2018, cada mes se produjeron en España un promedio de 160.652 percances de tráfico sin heridos. Esta cifra rebasa la media histórico disponible para las últimas dos décadas. En concreto, entre los años 1999 y 2018, la media se sitúa en 157.282 golpes.