El 2012 se ha cerrado como el año en el que menos accidentes de tráfico y menos víctimas mortales se han registrado en las carreteras extremeñas. 55 personas perdieron la vida en medio centenar de siniestros el año pasado, 12 menos que en el 2011 --un descenso del 21% frente al 12% de media nacional-- y 22 menos que en el 2010. Si los datos se comparan con las cifras del 2004, con 159 muertos, el número ha descendido en más de un tercio.

Así lo revelan los datos estadísticos que ayer aportó el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, al presentar el balance de tráfico del 2012. El número de accidentes con víctimas también se redujo con respecto al 2011, de 1.370 a 1.280 (90 menos), así como los heridos graves (de 317 a 284) y leves (de 1.710 a 1.543). Marzo fue el mes del año con más fallecidos en la carretera, con ocho (7 en Badajoz y 1 en Cáceres), mientras que noviembre fue en el que menos hubo: 1.

Por provincias, Cáceres experimentó el mayor descenso en el número de accidentes tanto en vías urbanas como interurbanas, con 469 siniestros frente a los 481 del 2011. Hubo 14 fallecidos, 12 menos que el año anterior y bajó el número de heridos graves y leves, según los datos de la jefa provincial de Tráfico, Cristina Redondo, que apuntó que los meses con mayor número de muertos en las carreteras cacereñas volvieron a ser los de verano (junio y agosto), mientras que en enero, abril, mayo y noviembre no se produjeron accidentes con víctimas mortales. "Es el primer año que ha habido cuatro meses sin fallecidos", destacó.

En Cáceres existe el único punto negro reconocido por Tráfico en la región, en la N-630, entre los puntos kilométricos 464,7 y 464,8, en la variante de Plasencia, donde en el 2012 se computaron tres accidentes con un muerto y 6 heridos.

En la provincia pacense, según el jefe provincial de Tráfico de Badajoz, Ignacio Martínez, aunque los accidentes mortales ha registrado un ligero descenso con respecto al 2011, de 40 a 36, el número de fallecidos se mantuvo en 41. En este sentido, apuntó que si bien las muertes en carretera han bajado de 38 a 35, en zonas urbanas hubo la mitad que este año. "Eso es una cuestión preocupante", dijo. Sí se redujeron los siniestros con víctimas, así como los heridos graves y leves.

Las salidas de vía por despistes del conductor (más del 40% de los casos) o la velocidad inadecuada (más del 20%) son las causas más frecuentes de los accidentes en la vías extremeñas.

López Iglesias señaló que a pesar de la tendencia positiva en materia de tráfico en la región --a la que ha contribuido la crisis económica al disminuir los desplazamientos--, no se puede bajar la guardia, "porque estos datos se nos pueden volver en contra en cualquier momento", por lo que se comprometió a seguir trabajando y pidió a conductores y peatones que extremen las precauciones.