3.300 personas mueren de cáncer anualmente en Extremadura, lo que representa el 28,7 por ciento del total de las defunciones que se registran en la comunidad autónoma.

Estos datos han sido facilitados hoy por el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, con motivo de la firma de un convenio entre este departamento de la Junta, el Servicio Extremeño de Salud (SES) y las delegaciones provinciales de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC).

De acuerdo con otros datos ofrecidos por Vergeles, el cáncer es la segunda causa de muerte en Extremadura y una de cada seis muertes en la región se producen por esta enfermedad .

Al año se diagnostican en la comunidad autónoma 4.700 nuevos casos de cáncer y esta dolencia genera más de 10.800 ingresos hospitalarios a lo largo de un año .

El consejero ha recordado que, según las previsiones de los organismos internacionales, una de cada tres mujeres y uno de cada dos hombres sufrirá algún cáncer a lo largo de su vida.

La buena noticia, a su juicio, es que tras los avances en investigación, detección y tratamiento, la supervivencia media se estableció en el último año en un 53 por ciento, "si consideramos al cáncer como una única enfermedad, que no lo es, porque cada tipo de cáncer es una enfermedad distinta".

El titular de Sanidad de la Junta ha destacado que el Plan extremeño Integral contra el Cáncer 2017-2021 destaca la importancia de la perspectiva comunitaria y de la atención sociosanitaria a estos pacientes.

En este ámbito se enmarca, según ha dicho, el convenio suscrito hoy con las delegaciones provinciales de la AECC en Cáceres y en Badajoz, que ofrecen a los pacientes y a sus familiares un apoyo por parte de los voluntarios, así como una atención psicológica especializada en oncología mediante los nueve profesionales con que cuenta la asociación en las distintas áreas sanitarias.

El convenio, que tiene una vigencia de tres años prorrogable, pretende "dar carta de naturaleza" y "oficializar" esta colaboración que ofrece la AECC, una colaboración "absolutamente necesaria", ha dicho Vergeles.

En ese sentido los asistentes a la firma del convenio han explicado que los voluntarios de esta asociación, unos 160 en la provincia de Cáceres y algo más de 300 en la de Badajoz, ayudan a afrontar a los enfermos y a sus familias la enfermedad, les asesoran y les orientan, además de animarles y entretenerles, como suele ocurrir mientras asisten a las sesiones de quimioterapia en los hospitales.

"Se trata de mejorar la vida de las personas que tienen cáncer", ha dicho la responsable provincial de la AECC en Cáceres, Carmen Romero, quien ha destacado que esta enfermedad "es un problema de todos y la lucha contra ella es también una tarea de todos".

Por parte de la de Badajoz, Andrés Bas Santa Cruz ha puesto de relieve la importancia de la atención sociosanitaria en este ámbito y ha recordado que muchos de los voluntarios han sufrido la enfermedad en "su propia carne o en su familia", por lo que están perfectamente preparados para apoyar y acompañar, ya que además reciben formación continuada.