Unas 30.000 personas se beneficiarán en Extremadura del ingreso mínimo vital, que el Gobierno ya ha aprobado hoy, y cuya cuantía oscilará entre los 461 y los 1.100 euros mensuales.
"Es la medida más importante que se ha tomado en mucho tiempo en este país", ha afirmado en rueda de prensa el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de Extremadura, José María Vergeles.
En su opinión, la renta extremeña garantizada deberá ser "una prestación subsidiaria" de este ingreso mínimo vital, que comenzará a abonarse de oficio en junio, tal como expuso este jueves la ministra de Hacienda y portavoz, María Jesús Montero.
A juicio de Vergeles, con esta medida "cambiarán" las cifras de pobreza y de exclusión social en la región. "Combatirá como nunca la vulnerabiliad y el riesgo de exclusión social" en la región, y "lo cambiará desde una prestación económica tramitada por el Instituto de la Seguridad Social (INSS) en el que todos estamos llamados a colaborar", ha agregado.
Vergeles ha felicitado al Gobierno central por esta iniciativa, su diseño y la sencillez para su solicitud, pues "aliviará a muchas familias y nos permite a las comunidades autónomas ir a más en la realización de las prestaciones".
