Cuatro de cada diez conductores en Extremadura han modificado su conducta al volante desde la entrada en vigor del permiso por puntos, y han sido el uso del cinturón y del teléfono móvil las infracciones en las que más han cambiado su comportamiento. Sin embargo, el 60% de los extremeños con permiso de conducir suspende en conocimientos sobre el sistema con puntos, según un estudio impulsado por ARAG, compañía líder en seguros de defensa jurídica y servicios legales, y desarrollado por el Instituto de Tráfico y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia.

El trabajo demoscópico, realizado a través de un total de 2.014 encuestas en toda España acredita el suspenso de los conductores de la región sobre sus conocimientos del permiso por puntos, ya que alcanzaron una media de 4,32 puntos sobre 10 al ser preguntados sobre cuestiones básicas de este sistema, aunque piensan que "tienen un conocimiento suficiente". El suspenso es generalizado en todas las comunidades.

AL DETALLE El informe, recogido por EFE, revela que el 60,77 por ciento de los conductores no tiene suficientes conocimientos sobre el permiso por puntos. Sin embargo, esta realidad contrasta con la percepción que ellos mismos tienen de sus propios conocimientos, pues el 92% ha manifestado que su nivel de comprensión del permiso por puntos le parece adecuado y suficiente. Además, el 81% de los conductores desconoce con cuantos puntos se penaliza el exceso de velocidad en ciudad, en carretera (68,92%) y por no mantener la distancia de seguridad (78,05%), y son muy pocos (26,81%) los que saben que no se restan puntos por no llevar encima el permiso.

A pesar de ello, los extremeños tienen una buena opinión de sus conocimientos sobre el permiso por puntos, pero la mayoría no son capaces de responder correctamente a preguntas elementales relacionadas con su funcionamiento. Las infracciones sobre las que se tiene más conocimiento son aquellas que se encuentran entre las prioridades de la Dirección General de Tráfico y son las relativas a conducir sin el cinturón de seguridad, utilizando el teléfono móvil o bajo los efectos del alcohol.

RESULTADOS Destaca el hecho de que los conductores de la comunidad piensan que el permiso por puntos ha tenido un mayor peso en la reducción de la mortalidad en el tráfico que se produjo en 2006. La consecuencia de la retirada del carnet más temida por los extremeños es no poder conducir durante unos meses, seguido por el hecho de tener que pagar 400 euros para recuperarlo.

El catedrático de Seguridad Vial Luis Montoro, responsable del estudio, ha apuntado que los resultados muestran que el Gobierno debería "divulgar más" el funcionamiento del permiso, porque hay "lagunas importantes" en el conocimiento popular y ha mantenido que el rechazo a que ciertos tipos de infracciones se castiguen con puntos muestra que hay aspectos "que no se han entendido".