De los 1.100 euros que iba a pagar Marta Montero este año por la matrícula en el cuarto curso de Medicina en la Universidad de Extremadura, ha tenido que desembolsar solo 15 euros. «Me llevé una sorpresa enorme. Había leído en el periódico que querían bonificar los créditos aprobados, pero pensé que sería una cosa más a largo plazo. Así que, me quedé sorprendida cuando formalicé la matrícula y, sin tener que hacer ningún trámite extra, me salió a pagar solo 15 euros», cuenta esta joven emeritense estudiante de Medicina en Badajoz.

Ella es una de las 7.000 universitarias y universitarios extremeños, los no becarios, que han estrenado la medida implantada este curso por la Junta de Extremadura, que permite la bonificación del 99% de los créditos aprobados (basta un 5) en el curso anterior en primera matrícula. Eso supone que un buen estudiante, como en el caso de Marta que aprobó las diez asignaturas del curso anterior, solo tenga que pagar el 1% del coste de su matrícula con otras diez asignaturas. «En mi caso, además, que estoy estudiando una carrera de seis años es un ahorro; para mis padres ha sido una alegría», cuenta esta joven que reside en un piso de estudiantes. «También creo que es una medida que sirve para motivar a los alumnos a estudiar y puede que ayude a atraer a más estudiantes a la Universidad de Extremadura», apunta.

«UN REPUNTE» / Ese es uno de los objetivos principales de su puesta en marcha, junto con la mejora del rendimiento, aunque todavía es pronto para hacer balance y comprobar si funciona. De momento, el rector de la Universidad de Extremadura, Antonio Hidalgo, avanzó en la inauguración del nuevo curso 2019-2020 que se apreciaba un «repunte» en el número de matrículados y «un cambio de tendencia en la retención de estudiantes» tras la puesta en marcha de esta medida. Cada año cerca de 2.000 alumnos extremeños se marchan a universidades de otras de otras comunidades.

Desde la universidad extremeña señalan que todavía no está cerrado totalmente el número de beneficiarios de esta bonificación, puesto que aún hay muchos universitarios pendientes del resultado de las solicitudes de beca del Ministerio de Educación (la concesión supone ya la gratuidad de la matrícula). Aquellos que no fueran finalmente becados, tendrían que asumir el coste de su matrícula y ahí se pondría en marcha de nuevo el sistema de bonificación. Por lo que a los datos iniciales que tiene a día de hoy la universidad -algo más de 7.400 estudiantes universitarios-, todavía podrían sumarse nuevos beneficiarios. Además, se están realizando ajustes en el sistema informático que gestiona directamente las bonificaciones y todavía es posible matricularse en la universidad. Por lo tanto, habrá que esperar para conocer tanto la efectividad real de la medida como su coste económico, que inicialmente la Junta estimó en unos cinco millones de euros anuales.

INSPIRACIÓN EUROPEA / La puesta en marcha de las matrículas casi gratuitas fue anunciada por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, durante el debate del estado de la región en junio del 2018. Proponía entonces algo que ya se implantó un año antes en Andalucía. Pero Extremadura no ha sido la única en poner el ojo a la iniciativa andaluza. Regiones como Aragón bonifican el 50% de las matrículas y en una decena de países europeos como Alemania, Grecia o los escandinavos las matrículas son gratuitas.