Acuerdo sin consenso y con matices en Ambulancias Tenorio para poner fin a la huelga indefinida que iniciaron el día 1 de noviembre en el transporte sanitario. Los representantes de los comités de empresa y de huelga acordaron por mayoría aceptar las mejoras propuestas por la empresa y desconvocar la movilización. De la decisión se desmarca USO, el sindicato mayoritario en el comité de empresa de la provincia de Badajoz, que no acepta el acuerdo porque no ve «garantías» suficientes por parte de la empresa para llevar adelante los compromisos. Los comités están integrados además por representantes de CSIF (preside el comité de la provincia de Cáceres), UGT y CCOO.

El acuerdo no ha sido fácil y el resultado no satisface tampoco a los que votaron a favor, aunque reconocen que recoge todo lo que habían solicitad a la empresa. De hecho la reunión, que se ha prolongó durante más de tres horas, vivió muchos momentos de tensión y fue necesario un receso para rebajar la tensión. Finalmente los 26 representantes de los trabajadores optaron por votar y se impuso el sí por 16 votos a favor, 8 en contra y 2 abstenciones. El ultimátum de la empresa esta semana acabó pesando en la decisión, según confirmaron varios de los presentes

«El acuerdo es un mal trago para a todos. Pero hemos optado por confiar en que cumplirán porque pensamos que una mayoría se puede ver beneficiada. Si no cumplen, nos estaremos dejando a compañeros atrás», señaló tras la reunión Antonio Baños, presidente del comité de Tenorio en Cáceres.

«Las medidas son insuficientes, pero son las que se habían pedido. Si cumplen, confiamos en que den estabilidad laboral. Y si no cumplen, estaremos en un escenario distinto en el que la reivindicación será más fuerte», subrayó Aureliano Brazo, de UGT.

La sensación es más satisfactoria en la dirección de empresa, que destacó que con el acuerdo de ayer se abre «una nueva etapa de estabilidad» en el transporte sanitario de la región.

demandas/ La propuesta aceptada incluye demandas como el aumento hasta un 80% del número de contratos en prácticas que se transformarán, contratación de trabajadores que no habían sido renovados, otros 70 nuevas contrataciones indefinidas y los 2,5 trabajadores en los PAC. Además, incluye mejoras de horarios y descansos y desatasca también la negociación del nuevo convenio, que la empresa se había negado a abordar mientras se mantuviera la huelga.

El sindicato USO se ha desmarcado del acuerdo con su voto en contra y mantendrá posición hasta que celebren una asamblea con sus afiliados, ya que no ven «garantías suficientes», según las palabras de Víctor Arnelas, representante de Transporte Sanitario de USO. A los integrantes de este sindicato no les han gustado ni los planteamientos ni el ultimátum de la empresa («o este acuerdo o no hay acuerdo»). «Los avances han sido escasos y más que avanzar se ha retrocedido en aspectos tan importantes como el abuso de las ambulancias de Urgencias, cuyos técnicos-conductores están siendo sometidos a cargas de trabajo brutales para ofrecer más descanso a los trabajadores de programado». Piden a la empresa «una solución digna» para todos.