Si se viaja en coche de Cáceres a Plasencia se puede comprobar que la nueva plataforma está prácticamente acabada. La vía se encuentra «en estado muy avanzado». Y en el tramo entre la capital cacereña y Badajoz, todo el montaje ya ha finalizado (aunque faltan los enlaces con las estaciones actuales, que serán sustituidas por otras nuevas). Es el último parte de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) sobre la línea de alta velocidad extremeña. Se mantiene la fecha de finalización de las obras antes de que acabe 2019 (en algo más de dos meses); y ya en ese momento se harán las primeras pruebas de seguridad para que a principios de 2020 empiecen a circular los trenes por la nueva plataforma Plasencia-Badajoz, que contará con doble vía entre Mérida y Cáceres y entre Cáceres y Plasencia.

A la altura de la capital del Jerte, esta vía quedará conectada a la actual línea convencional Madrid-Extremadura.

De este modo, «se obtendrán mejoras en los tiempos de viaje como resultado de poder circular ya por una plataforma diseñada y construida conforme a los requerimientos de la alta velocidad en el mencionado tramo Plasencia-Badajoz (de 164,6 kilómetros)», subrayan desde Adif.

Esa mejoría significará que los convoys entre Badajoz y Plasencia podrá circular a una velocidad máxima de hasta 180 kilómetros por hora y que en el trayecto completo Madrid-Cáceres-Mérida-Badajoz el ahorro de tiempo será de casi una hora.

LA ELECTRIFICACIÓN / Otra fecha que se mantiene es que en 2020 (no se sabe en qué momento del año) llegará la electrificación. Ya están adjudicadas las obras entre Plasencia y la bifurcación de Peñas Blancas (son unos 125 kilómetros de trayecto).

Asimismo, «se trabaja para poder licitar la electrificación del tramo Mérida (Peñas Blancas)-Badajoz, que requiere de tramitación ambiental.

¿Qué implicará este nuevo cambio cuando la vía ya esté electrificada? Que los trenes podrán alcanzar velocidades máximas de hasta 300 kilómetros por hora optimizando aún más los tiempos de recorrido en el camino hacia Madrid.

La mejora será en la parte extremeña aunque beneficiará al viaje complejo. Pero, ¿en qué situación están las otras dos fases de la línea de alta velocidad hacia la capital madrileña?

PLASENCIA-OROPESA, AL 28% / En la línea Plasencia-Oropesa (de 68,6 kilómetros) queda aún un subtramo pendiente de salir a licitación: el Arroyo de Santa María-Navalmoral de la Mata (6,8 kilómetros) se encuentra todavía en fase de redacción del proyecto.

La mayoría del trazado está adjudicado y las obras han finalizado en un 28% de esta plataforma, en la cual ya se ha iniciado el montaje de la vía.

Pero no hay anuncios que hablen de una fecha tope para acabar esta fase; no existe compromiso concreto.

Y lo mismo ocurre con la siguiente: la línea que discurre entre Oropesa y Madrid continúa en el aire. Desde Adif vuelven a indicar que el tramo se encuentra «en redacción del estudio informativo». Fue adjudicado por el Ministerio de Fomento en febrero de 2018, y sigue en el mismo punto.

Los últimos presupuestos generales del Estado recogían 2025 como fecha de finalización de toda la línea de alta velocidad Madrid-Extremadura. Al ritmo actual, cabe la posibilidad de que, tras años de retrasos, haya que esperar un lustro más para que el recorrido completo hasta la capital madrileña esté adaptado al siglo XXI.