Cuando la línea ferroviaria que une España y Portugal por Valencia de Alcántara, usada básicamente por el Lusitania Tren Hotel, cumplía 42 días cortada, Adif y Renfe lanzaron ayer un comunicado para anunciar que ya se ha iniciado "el proceso para la licitación y adjudicación, por vía de urgencia, de las obras de reparación necesarias". Antes, la Delegación del Gobierno en Extremadura ya había asegurado, también en nota de prensa, que la conexión por tren entre Cáceres y Lisboa "no se cerrará", saliendo de este modo al paso de las sospechas --manifestadas tanto por el PP como por los sindicatos del sector ferroviario en la región-- de que el suspenso temporal del servicio, tras el accidente del pasado 23 de enero, podría convertirse en definitivo.

El Ejecutivo central justifica dicha interrupción por razones de seguridad, ya que, según reconoce, "la antigüedad de esta línea férrea hace aconsejable una inversión de consolidación para asegurar la vida de todos los ciudadanos". Con este objetivo, se compromete a acometer "las inversiones necesarias para modernizar las vías", en base a lo cual reitera que "la línea no se va a cerrar".

Más allá va el comunicado del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), emitido de forma conjunta a Renfe, en el que asegura que "no se ha planteado en ningún momento" el cierre de la cuestionada línea, por lo que ya habría iniciado el proceso para licitar y adjudicar las obras de reparación necesaria. Según la entidad pública, es tal su interés por la "pronta reapertura de la línea a las circulaciones ferroviarias" que ha establecido "por vía de urgencia" el referido proceso, lo que acortará los plazos y "permitirá que el procedimiento haya concluido previsiblemente la próxima semana".

El comunicado recuerda que el corte se produjo tras un accidente el pasado 23 de enero y señala que aunque el material accidentado se retiró a los pocos días, "no significa que el tramo afectado ofreciera las condiciones necesarias para el restablecimiento de la circulación". Sin embargo, esta nota no hace ninguna referencia a la evaluación de las deficiencias de la vía entre Arroyo-Malpartida y San Vicente de Alcántara, según informaron a este diario fuentes de Adif que aseguraron que ese "estudio de campo" estaría retrasando también la reapertura de la línea.