El sector de la agricultura ecológica en Extremadura comienza a percibir indicios de estabilización tras varios años de descenso continuo de la superficie y de la cifra de productores. En el 2007, por primera vez en esta década, aumentó la superficie destinada a este tipo de agricultura y ganadería, aunque continúa el goteo de operadores.

"Estamos en un momento de consolidación", reconoció ayer Juana Labrador, presidenta de la Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE) y profesora de la Universidad de Extremadura. Ella, junto a medio centenar de personas relacionadas con este sector participan estos días en Cáceres en las jornadas La Alimentación ecológica es calidad , organizadas por la Asociación de Empresarios Ecológicos de Extremadura.

Los datos definitivos del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino indican una leve recuperación del sector en la región. Así, entre el 2006 y el 2007 la superficie cultivada se incrementó de 64.557 hectáreas a 65.678, un ascenso que rompe con un tendencia negativa que había llevado a Extremadura a perder casi 100.000 hectáreas de este tipo de cultivos y ganadería desde el 2002 --ese año había en la comunidad 164.339 hectáreas--. "Siempre ha sido una de las principales productoras a nivel nacional debido al apoyo de las Administraciones. Pero hubo unos años en los que ese respaldo bajó y eso se ha notado. Ahora está comenzando a recuperarse y consolidarse", apuntó María Ramos, responsable del Centro Nacional de I+D de Agricultura Ecológica que se está construyendo en Plasencia, y que achaca este cambio a los planes regionales de apoyo que se han puesto en marcha desde las Consejerías de Agricultura y Economía.

En estos momentos Extremadura es la tercera comunidad autónoma con mayor superficie registrada, tras Andalucía (582.000 hectáreas) y Aragón (70.200). En toda España hay 988.000 hectáreas. Y en cuanto a número de productores --cuenta con 3.629, casi la mitad que en el 2002--, es la segunda, por detrás de Andalucía --7.175--.

RETOS Según destacaron María Ramos y Luis Antonio Cornejo, jefe del área de Agricultura Ecológica del Ministerio de Medio Ambiente, este tipo de explotaciones en Extremadura se caracteriza por su gran diversificación, con producción en todos los subsectores agropecuarios. El más importante, a nivel de superficie, es el olivar, seguido de la ganadería (con 80 explotaciones) y los cereales. "El sector hortofrutícola está comenzando a despegar, sobre todo en fruta de huesos", concreta la responsable del Centro Nacional de I+D de Plasencia.

Los expertos se muestran optimistas de cara al futuro, aunque reconocen que queda mucho por hacer. "El consumo de estos productos en España sigue siendo escaso; la mayor parte de la producción se destina a exportación", apunta Cornejo. "Y la industria está por consolidarse", añade Ramos, que recuerda que la región solo cuenta con 88 empresas transformadoras --por detrás de ocho regiones a pesar de ser puntera en superficie y productores--. En su opinión, además hay que trabajar más en la investigación para mejorar la producción y la calidad, así como mejorar la comercialización --como ampliar los puntos de venta o suprimir intermediarios para evitar sobrecostes al consumidor.--.

Con ella coincide Juana Labrador: "En Extremadura los programas de investigación sobre agricultura ecológica están de capa caída. no nos dan financiación, no tenemos las mismas oportunidades".