Los agricultores y ganaderos extremeños recibirán este año 10 millones de euros en ayudas para fomentar el aseguramiento agrario, una línea de apoyo que la Junta de Extremadura mantiene desde los años 90 "para favorecer que los agricultores y ganaderos de la región aseguren sus producciones y, con ellas, su renta, al margen de las posibles condiciones climatológicas adversas o catástrofes naturales", según indicó ayer el Gobierno regional.
Para la Administración regional, los seguros agrarios son un "instrumento fundamental de solidez económica y social", ya que según señaló, "garantiza la estabilidad de las rentas agrarias y la continuidad de los cultivos, reduciendo las incertidumbres y los riesgos a los que está sometido el sector". Por ello, subvencionará parte de las primas de los seguros a los agricultores que los contraten, a través de Agroseguro (Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados).
En concreto, las ayudas autonómicas se dirigirán a las líneas de seguro de cobertura de gastos derivado de la destrucción de animales muertos en las explotaciones y su renovación, que contará con una subvención del 34% del coste neto; para el caso del seguro combinado de tomate, la ayuda será del 57% sobre la subvención concedida por la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa); y para el seguro de explotación de cereza en Cáceres, así como para el de explotación de frutales y el seguro combinado de tabaco, la subvención alcanzará el 45% del coste.
En el 35% queda fijada la ayuda para los seguros combinados de cereza, cereza de Cáceres y el seguro de sequía en los pastos aprovechados por el ganado.
