La figura de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) nació a raíz de una directiva de la UE (79/409/CEE), que considera que las aves del territorio europeo constituyen un patrimonio común y una responsabilidad conjunta. Su objetivo es la conservación y adecuada gestión de todas las especias que viven en estado silvestre en el territorio de la comunidad europea, 175 de especial protección. Los Estados miembros tienen la obligación de conservar los territorios más adecuados para su supervivencia. Hasta ahora se han declarado en Europa más de 650.

España, con 170 Zepas en estos momentos, deberá especificar antes de fin de año el número de estos enclaves y de los Espacios de Especial Conservación (ZEC), dos figuras que formarán la red europea Natura 2000. En Extremadura existen 31 Zepas: 14 ya clasificadas y 17 de nueva catalogación, que también serán publicadas en el Diario Oficial de Extremadura antes de final del 2004.

Las primeras se sitúan en Monfragüe, Cornalvo, Sierra de San Pedro, los Llanos de Cáceres y Sierra de Fuentes, Orellana y Sierra de Pela, Hornachos, La Serena, Sierra de Siruela, Sierra de la Moraleja y Piedrasanta, Jerez, Puerto Peña y los Golondrinos, Villuercas e Ibores, Canchos de Ramiro, y Tajo Internacional y Riberos.

Las nuevas ZEPAS se extienden por el embalse de Arroyo Conejos, Valuengo, Almendralejo, La Albuera, Peñalsordo y Capilla, pantano de Montijo, los Canchales, Llanos de Zorita y Sierra Brava, Llanos de Trujillo, Riberas del Almonte, Llanos de Alcántara y Brozas, Valdecañas, Arrocampo, Borbollón, Gata y Valle de Pilas, Las Hurdes y Sierras Centrales.