El alemán, imparable. La lengua germana no deja de ganar adeptos entre los extremeños, principalmente entre los jóvenes. Si el año pasado las principales escuelas de idiomas de la región empezaron a admitir a los alumnos en esta enseñanza vía preinscripción, como ocurre habitualmente con el inglés, este año ya tienen incluso listas de espera con números de hasta tres cifras.

El curso pasado ya se quedó gente fuera en Cáceres y este serán más. En Badajoz pasará lo mismo y por primera vez no habrá plazas para todos, cuenta la profesora de alemán Pilar Moreno: "este año es el boom de todos los 'booms'". "Estamos desbordados", cuenta la profesora de alemán de la EOI de Cáceres, Inés Sanchez, que junto a otro docente, Pedro del Sol, se afanan estos días en poner las últimas calificaciones. "Sería necesario al menos un profesor más --son tres en plantilla en este centro--, pero los recortes no juegan a nuestro favor". Sánchez señala que la demanda por aprender alemán ha subido por encima del resto de los idiomas. "Entre los demandantes, muchos jóvenes titulados, como ya se empezó a apreciar el curso anterior, pero también adolescentes. "Se está notando que muchos padres están animando a sus hijos".

En concreto, estos profesores cuentan que se han recibido más de 400 preinscripciones para aprender este idioma en el centro oficial de Cáceres, que se suman a los viejos alumnos. En Badajoz las preinscripciones también superan las 400 "y hemos abierto un grupo más de primero básico, ya tenemos cinco, para acoger al mayor número posible, unos 200. La demanda se ha multiplicado en los dos últimos años por tres y hasta por cuatro, y cuando se cierren las listas habrá más alumnos que en italiano y en francés; el inglés y portugués son más difíciles de desbancar aquí", precisa Moreno.

"Antes estábamos pendientes de los alumnos, eran ocho o diez por clase y ahora es imposible absorber a todos porque solo tenemos capacidad para atender a cinco grupos de alumnos de primero, y cada grupo está formado por un máximo de 25 personas", explica Sánchez. Esto significa que solo en Cáceres más de 200 personas no podrán estudiar alemán en este centro.

Pero aún tienen alternativas, aunque menos económicas. Las academias privadas están aprovechando el tirón que los idiomas están experimentando y están ampliando su catálogo de servicio. Es el caso de la academia Biblos, de Badajoz, que en octubre estrenará su propio centro de idiomas, independiente, en el que por supuesto no falta el alemán.

También impartirán inglés y francés. "Pese a la crisis me lanzo a abrir este centro de idiomas porque hay demanda. Yo intento dar a mis alumnos lo que me piden y alemán es muy demandado. De hecho acabamos de terminar un curso intensivo para un chico que se iba a trabajar a Alemania y estamos a la espera de dar otro a cuatro enfermeras que han encontrado trabajo allí", señala Mayte Batalla, gerente de Biblos. Lo mismo le ocurre a Carolina Perales, de la academia Educa de Cáceres, pero a ella con otros idiomas. Su apuesta son el inglés, con nativos desde este años, y desde el año pasado el chino. "Es un mercado que está arrasando y ofrecemos todos los niveles: el 0 para los que no saben nada; el 1 para los que saben algo, como los niños adoptados o los que nacen aquí pero sus padres son de China", señala

Tras esta avalancha del alemán, los docentes estiman que siguen estando las promesas de empleo cualificado de Angel Merkel --aunque su anuncio fue el año pasado--, las crisis económicas y las expectativas de futuro, que aquí parece que se aprecian pocas.