Asociaciones de consumidores y de estudiantes han realizado un llamamiento a los universitarios que deciden alquilar una vivienda durante el curso académico, a fin de que tomen una serie de precauciones para que, en caso de necesidad, no tengan problemas con los contratos. Según estos colectivos, en ocasiones los propietarios de los inmuebles se niegan a realizar un contrato de alquiler porque prefieren cobrar en dinero negro, o, si lo hacen, puede que se nieguen a cumplir lo acordado, situaciones que podrían generar numerosos contratiempos a los estudiantes.

Exigir la firma de un contrato que explicite los derechos y los deberes de cada parte, y que incluya una lista con los muebles y electrodomésticos que tiene la vivienda, es una de las principales recomendaciones que hace la Unión de Consumidores de Extremadura (UCE), que incide en que se exija al menos un recibo que constate que se ha abonado el importe del alquiler.

Las denuncias que se reciben en el Consejo de Alumnos de la Uex y en las asociaciones estudiantiles coinciden en su mayor parte en que los acuerdos pactados en cuanto a muebles y electrodomésticos no se cumplen. "Los caseros se aprovechan principalmente de los más jóvenes. Lo normal es que no te devuelvan las fianzas o que cuando entres a vivir no estén las cosas que aparecían en el contrato. Las quejas suelen ser muchas", asegura Alicia Muñoz, de la asociación de universitarios Aunex.

Por ello, aconsejan que la mejor solución es elaborar un anexo en el que aparezca un inventario con los enseres que existan en la vivienda y asegurarse de que todo está en buenas condiciones.

AL OCUPAR LA VIVIENDA

Los principales problemas suelen darse nada más ocupar la vivienda, indica Santiago Márquez Broncano, presidente de la Asociación de Consumidores y Usuarios de Extremadura. "Los estudiantes suelen dejar todo para última hora. En muchas ocasiones la búsqueda y alquiler se hace deprisa y sin tener mucho cuidado y luego aparecen las irregularidades", sostiene.

Pero existen otro tipo de irregularidades. Todos coinciden en señalar que muchos estudiantes denuncian que los dueños de los pisos entran en las viviendas sin avisar, una situación ilegal, ya que durante el tiempo de alquiler el arrendatario es el propietario del piso, por lo que puede cambiar si quiere la cerradura.

Tanto asociaciones de consumidores como de estudiantes prestan asesoramiento a todos aquellos que tengan un problema de estas características, incluso algunas entregan un contrato tipo para poder seguirlo.