El Almacén Temporal Centralizado de combustible gastado y el centro tecnológico asociado deberán estar en marcha en el 2011 para poder hacer frente a los residuos radiactivos. De ahí, las prisas y la urgencia por encontrar una ubicación, puesto que la previsión indica que la construcción se prologaría durante cuatro años. Esta edificiación implica la preparación del terreano, la construcción de los edificios generales y de las primeras cuatro bóvedas de almacenamiento. En la siguiente fase, se añade un segundo edificio de almacenamiento disponible en seis años, después del inicio de la explotación de la instalación, y un tercero disponible en 14 años.

Los costes previstos se elevan a 540 millones de euros.